Hazte premium Hazte premium

Insultos, drogas y violencia: los cinco casos más difíciles de «Hermano Mayor»

El programa estrena nueva temporada este viernes con Jero García como coach

ABC PLAY

1

Iván

Iván es un joven cuya prioridad en la vida es pasarse las horas conectado a internet sumergido en los videojuegos online. Sin ninguna preocupación ni nada más que hacer en su día a día, las jornadas se limitan al juego en la red.

La situación se vuelve más complicada cuando se relaciona con sus padres. Amenazas, robo de dinero y golpes son la tónica habitual en su casa. Un infierno para el que sus padres intentaron buscar solución llamando a «Hermano Mayor». Un vigilante para que no agrediera a sus padres y la ayuda de David Bustamante fueron necesarios para que se diera cuenta de la realidad.

2

Ada

La joven de 20 años se reveló desde el inicio del programa como una hija inmadura, manipuladora y celosa de compartir el cariño de su madre. Incluso había perdido a su mejor amiga por una pelea: «Me pinchó la rueda y me pegó. Tengo miedo y le he puesto una orden de alejamiento», declaró esta última en el programa.

La situación, ya desesperada, se convirtió en insostenible cuando Ada se rompe el tendón de Aquiles dando una patada al portal de su casa, lo que obliga a Pedro García Aguada a detener la grabación del programa por primera vez en la historia de sus siete temporadas.

Dos meses después, García Aguado se ve obligado a retomar la terapia sin esperar a que acabe la baja ante la agresiva actitud de Ada. La mete en una incubadora para hacerle ver su dependencia de su entorno y también habla con su madre para hacerle ver que la trata habitualmente como un bebé. Desde dentro, falta al respeto a su familia e incluso llega a escupir al presentador del programa, además de levantar la mano a su madre.

La situación llega a un punto límite cuando García Aguado recurre a la ayuda de la religiosa Sor Lucía Caram. La monja lleva a Ada hasta un albergue para jóvenes problemáticos y le pone frente a la realidad de gente que lo ha pasado peor que ella.

3

Julio Alberto

Durante la tercera temporada de «Hermano Mayor», Julio Alberto se convirtió en protagonista. Se trataba de un joven con un problema de adicción a las drogas que le llevaba a tener un comportamiento en casa paranoico. Julio Alberto acusaba a sus padres de todo lo que le sucedía y les exigía importantes cantidades de dinero que posteriormente se gastaba en drogas.

El centro de desintoxicación no pudo ayudarle, pero gracias a «Hermano Mayor» comprendió la raíz de sus problemas y optó por combatirlo. Su experiencia ahora ayuda a otros jóvenes con problemas gracias a la publicación de un libro con su historia personal.

4

Alejandro

La segunda temporada de «Hermano Mayor» arrancó con la historia de Alejandro. Un joven que consumió toda clase de drogas a una edad muy temprana, lo que le llevó a situaciones límite. Dejó de estudiar y aunque tuvo un trabajo lo perdió al cerrar la empresa y ya no le queda ni paro.

Alejandro recrimina a sus padres que no le den más dinero para sus gastos. Se levanta a mediodía, come si le gusta lo que hay sobre la mesa y se va con los amigos de su antiguo barrio. Como vive a contracorriente, se pasa toda la noche despierto, deambulando por la casa, en una habitación que ha convertido en una auténtica pocilga.

5

Gisela

Es uno de los casos más recordados de la primera temporada de «Hermano Mayor». Gisela, Gigi, es una joven de 18 años que tiene atormentada a su madre y a su abuela, con quienes vive.

Gigi no trabaja, no estudia y se pasa el día en la calle; sale de casa cuando le apetece, y ni su madre ni su abuela saben cuándo va a aparecer. Desde siempre ha hecho lo que ha querido, sin horarios ni normas.

La insostenible situación en el hogar llega hasta tal punto que la convivencia entre las tres se ha vuelto insoportable; abundan los gritos, los insultos, las agresiones y Gigi amenaza con romper cualquier cosa para que le dejen hacer lo que quiera. Pero con quien más problemas tiene la joven es con su abuela; ambas se pasan el día insultándose.

En parte, su madre reconoce que tiene culpa de la actitud de su hija porque tuvo problemas personales y dejaba a su aire a Gigi cuando era pequeña. Por querer ser su amiga ha cometido el error de no decirle un no a tiempo a su hija y piensa que ya es demasiado tarde.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación