La joven de la perla

Delft, Holanda, 1665. Griet, de 17 años, debe ponerse a trabajar porque su padre se ha quedado ciego. Encuentra un empleo como sirvienta en casa de Johannes Vermeer, un pintor que irá sintiéndose cada vez más cautivado por la presencia de la muchacha.

Peter Webber, autor de varios telefilmes, esperaba desde hacía tiempo su salto a la gran pantalla. Finalmente lo hizo con esta película, que cuenta la historia de una atracción imposible. El filme se basa en una novela de Tracy Chevalier, que a su vez se inspira en la vida del pintor holandés Johannes Vermeer, concretamente en su cuadro "La Gioconda del Norte", conservado en el museo Mauritshuis de Holanda. El cuadro parece ser la observación de una mujer en una situación cotidiana, pero su rostro esconde algo más. En realidad, nada se sabe de la joven del cuadro, pero Chevalier imaginó una historia para ella. La encargada de dar vida a la joven fue Scarlett Johansson ("Lost in Translation"), mientras que Colin Firth ("El diario de Bridget Jones") encarnó al pintor. El filme destaca por su fotografía (inspirada en las pinturas de Vermeer) y por la dirección artística.