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La gran mentira del «Ningún animal ha sido lastimado» durante este rodaje

La revista «Hoollywood Reporter» desvela que las asociaciones encargadas de velar por la seguridad de los animales en el cine y la televisión conceden en ocasiones de manera inmerecida este sello

La gran mentira del «Ningún animal ha sido lastimado» durante este rodaje ABC

NATURAL

La American Humane Association (AHA) controla que los animales que participan en los rodajes cinematográficos y televisivos no resultan lastimados. Otorga un «sello» a aquellas cintas, series o anuncios que han tratado de manera adecuada a estos atípicos artistas en forma de sentencia final que aparece en los créditos: «Ningún animal ha resultado herido» .

Sin embargo, hay veces que las películas, series y anuncios que emplean animales consiguen este sello sin merecerlo , tal y como apunta una investigación publicada por la revista Hollywood Reporter elaborada a partir de los correos internos que se transmitían unos a otros los distintos miembros de la AHA.

Ya se conocía que las ovejas y cabras que habían «actuado» en «El Hobbit: un viaje inesperado» habían perecido víctimas de deshidratación. Y que el tigre de bengala de la «Vida de Pi» se perdió y casi se ahoga cuando trataron de meterlo en un bote. O que varios caballos del drama «Luck» de la cadena HBO murieron extenuados.

Ahora salen a la luz más atropellos. Un husky de la producción de Disney «Bajo cero», protagonizada por el finado Paul Walker, fue golpeado de manera repetida en el diafragma. Una ardilla fue pisoteada (y aplastada) mientras Matthew McConaughey y Sara Jessica Parker se dedicaban pullas y sonrisas a partes iguales en la comedia romántica «Novia de alquiler». Decenas de peces y calamares , tras cuatro días a bordo del «maldito» navío pirata «Perla Negra», fueron arrojados muertos a la costa en 2003. Y el príncipe Caspian, de las Crónicas de Narnia, seguro que vio lo que pasaron por alto los observadores de la AHA: caballos con quemaduras en la espalda y la nariz como consecuencia de los latigazos infligidos por los jinetes con sus fustas.

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