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Un águila electrocutada salva la vida gracias al trasplantate de todas las plumas mediante injertos con fibra de vidrio

Tras dos meses de recuperación, fue liberada en el Parque Natural Los Alcornocales para que pudiera incorporarse al paso migratorio que realiza su especie por Cádiz hacia África

Un águila electrocutada salva la vida gracias al trasplantate de todas las plumas mediante injertos con fibra de vidrio MIGRES (águilas imperiales sobre un tendido eléctrico)

EP

Los técnicos del Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) de Dunas de San Antón, de la Consejería andaluza de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio , han logrado salvar la vida de un ejemplar de Águila culebrera ( Circaetus gallicus ) que había sufrido una grave electrocución por contacto con un tendido eléctrico.

El animal fue intervenido durante más de cuatro horas: le transplantaron todas las plumas de ambas alas y cola utilizando varillas de fibra de vidrio, un material ligero y fácil de trabajar, para unir las plumas dañadas y las nuevas.

Cuando el águila fue trasladada al CREA de El Puerto de Santa María mostraba una herida por electrocución en cada pata y todas las plumas de vuelo quemadas e inservibles para volar. Ante tal situación, los veterinarios optaron por realizar injertos de plumas, ya que la muda del plumaje completo de manera natural tarda más de un año y habría supuesto que el animal permaneciese ese tiempo en el CREA y no pudiese migrar con su especie tras el verano.

Se utilizaron plumas de tres donantes diferentes (dos cadáveres y un ejemplar irrecuperable) de ejemplares del mismo taxón . Las «nuevas» plumas permanecerán en el ave hasta que mude el plumaje por sí sola.

Incorporarse a la migración

El equipo de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio también trató las heridas en las patas del águila, ante la pequeña posibilidad de que se conservara el riego sanguíneo debajo de las heridas.

Se realizaron curas diarias las primeras semanas y tras dos meses de tratamiento las heridas cicatrizaron.

Tras las intervenciones, el águila fue trasladada a una instalación especial para realizar vuelos y poder ganar masa muscular y destreza.

Después de unas semanas de rehabilitación, el paciente ha sido liberado a principios de este mes en el Parque Natural de Los Alcornocales, para que pudiera aprovechar el paso migratorio que realizan las águilas culebreras por Cádiz.

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