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BMW

¿Un Ferrari eléctrico? ¡Existe!

Se trata de una sorprendente transformación que lo hace más rápido que el original de gasolina, aunque lógicamente carece del bramido de aquel

Madrid Actualizado: Guardar
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La firma norteamericana Electric GT ha transformado todo un Ferrari de gasolina en un súper deportivo ¡eléctrico! Sí, tal cual se lee y se puede ver en el vídeo sobre estas líneas.

Se trata de una conversión de un clásico targa (con techo desmontable sobre los 2 únicos ocupantes del vehículo) 308 GTS, producido en los años 70, en el primer cavallino rampante eléctrico 308 GTE cero emisiones.

La compañía, con sede en San Diego (California), se dedica a la producción de automóviles eléctricos a partir de otros antiguos. Así que, sin andarse por las ramas, ha rescatado una unidad de 308 GTS original de 1978, que había sufrido un incendio en el motor y el sistema eléctrico, y que iba destinada a convertirse en chatarra, sin más.

Como cabe imaginar, el trabajo de restauración no ha sido precisamente sencillo, en parte porque casi toda la carrocería había quedado carbonizada tras el siniestro. Las labores han durado meses y han exigido una fuerte inversión económica.

Así, el 308 dejó atrás un bloque de gasolina 2.9 V8 de 240 CV y 264 Nm de par máximo para hacerse con un conjunto que libera 465 CV y nada menos que 447 Nm, pero que no emite ningún tipo de emisión contaminante.

El coche, que lógicamente no suena (ni poco ni mucho, más allá del chirrido de sus neumáticos apretando con ganas el pie derecho), es más rápido que el original, sobre todo por aceleración. Por cierto, camufla la toma de recarga en una trampilla escamotable situada detás de la puerta del conductor.

Autoriza una autonomía de 160 km (las baterías van alojadas en el vano delantero, y el grupo motropropulsor justo detrás del habitáculo, por delante del eje trasero, que es el de tracción) y asocia una caja de cambios manual de cinco relaciones G50 fabricada por Porsche. Curiosa combinación, ¿verdad?

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