Rafael Nadal, Tenista

Rafael Nadal es todo lo que se le pide a España, deportista en mayúsculas y héroe eterno tanto por los trofeos que carga en la mochila como por las formas exhibidas. Nadal, a sus 30 años (Manacor, Mallorca, 1986), presume de bandera por todos los rincones del planeta, un español ejemplar que persigue su enésima reencarnación en este 2017.

-La de 2016 fue una temporada extraña, marcada por un desenlace inesperado, ya que anunció en octubre que se tomaba un respiro para recuperarse de la muñeca izquierda. ¿Qué balance hace?

-Fue un año en el que no tuve mucha suerte porque había hecho un buen trabajo para ponerme en una situación positiva y cuando llegué a ese momento de la competición importante estuve dos meses y medio a un nivel muy alto, capacitado para luchar por todos los torneos donde estaba compitiendo. De hecho, conseguí encadenar una buena racha de resultados: semifinales en India Wells, campeón en Montecarlo y Barcelona, cuartos con Djokovic en Roma con una derrota ajustada... Llegaba a Roland Garros bien, pero me lesioné la muñeca, y esa lesión fue decisiva para mal a mitad de año. Hice un esfuerzo muy grande para llegar a los Juegos Olímpicos de Río y me hizo muy feliz haber conseguido el oro en dobles. Jugué posteriormente con la mano resentida, pero no pude continuar con la temporada, dado que estaba jugando con demasiados problemas y eso me impidió competir bien.

-Y ahora, ¿qué espera en 2017?

-Ojalá que pueda competir todo el año con salud, sin lesiones, y si es así espero poder estar competitivo y luchando por las cosas que realmente me motivan.

-¿Qué objetivo principal se marca?

-Mi objetivo es retomar cuanto antes las sensaciones que tuve antes de lesionarme el año pasado. Si consigo eso, que espero que lo logre yendo día a día, con el esfuerzo requerido y pensando en hacer las cosas bien como las estoy haciendo, espero y confío en que los buenos resultados vayan llegando.

-¿Ha llegado a desesperarse por no competir con regularidad por culpa de los problemas físicos?

-No, desesperarme no, no es algo nuevo en mi carrera, son golpes que llegan, pero es así. Yo soy una persona positiva y siempre intento pensar que las cosas van a mejorar. Cuando ocurren estas cosas hay que estar tranquilo, saber que tienes que recuperarte, saber que hay que ser paciente, y cuando llegue el momento de volver a entrenar, recuperar la ilusión y tener las ganas y el espíritu de sacrificio diario suficiente para luchar y volver a ponerte a un nivel óptimo de juego y resultados.

-¿Está para luchar de nuevo por los grandes torneos?

Como le digo, soy una persona positiva y, si las lesiones me respetan y puedo trabajar, espero que así sea. Si no creyera en esto y no viera así las cosas, probablemente no estaría aquí, estaría dedicándome a otros asuntos.

-¿Tiene en mente defender a España en la Copa Davis en 2017? ¿Ve posibilidades de luchar por la Ensaladera?

-Creo que hemos vivido una época fantástica del tenis español, en la que se han ganado muchas Copas Davis en un espacio de tiempo muy corto. Ahora necesitamos el apoyo de nuevos jugadores de las nuevas generaciones que vayan llegando y nos ayuden a conseguir nuevas victorias. Por lo que se refiere a mi participación, si estoy sano y me siento bien, siempre tengo la ilusión de representar a España. Siempre ha sido así. Este año no será una excepción, siempre que, como digo, mi físico me lo permita.

-¿Qué espera de Carlos Moyá en su equipo?

-Carlos ante todo es un gran amigo mío, una persona que conozco bien y que me conoce bien. Conoce mi mentalidad y mi estilo de juego, y creo que es una ayuda extra que espero que nos dé al resto del equipo un punto de vista más y nos ayude a seguir creciendo, y a mí como jugador.

-¿Qué quiere para España en 2017?

-Siempre digo que tenemos un país extraordinario. Yo, que viajo por el mundo, lo veo, puedo comparar y apreciar lo que tenemos. Tenemos que ser más positivos y seguir trabajando para hacer mejor nuestro país. Ojalá la economía ayude y se recuperen los puestos de trabajo para todos.