Belén Esteban guardaba entre 5.000 y 6.000 euros en la caja fuerte de su casa

Los ladrones se llevaron consigo la caja de caudales, que no estaba encastrada en la pared: el dinero en efectivo, joyas, relojes... Asimismo, robaron un ordenador y teléfonos móviles .

La alarma estaba desconectada, pero aún así, los ladrones la destrozaron. Incluso, como ha confirmado la propia afectada, se apropiaron de parte de su ropa interior y hasta se bebieron una lata de refresco. Las mismas fuentes indicaron que no creen que detrás del asalto haya una motivación personal contra Belén Esteban; sino que se trataría de un suceso obra de una banda especializada en este tipo de delitos.

Eso sí, todo apunta a que sabían de quién era el chalé y que sus moradores estaban fuera de casa. En este tipo de sucesos, una de los flancos que se investiga es si la banda contaba con la ayuda de alguien que les proporcionara información privilegiada de horarios, rutinas y bienes del interior de la vivienda, lo que se denomina un «santero».

Es el «modus operandi» que utilizan estos grupos, menos peligrosos que los especializados, como los albaneses (fueron quienes amordazaron, golpearon y robaron a José Luis Moreno en su mansión de Boadilla), en asaltar domicilios con sus propietarios en el interior. En casos como el de Belén Esteban, el delincuente comete un delito de robo con fuerza en el interior de domicilio; es decir, un delito patrimonial, y no contra las personas, por lo que la pena es muy inferior en el caso de que sean detenidos.