DEPORTE FEMENINO
Brega a golpe de remo
Susana Mut, con tres Copas de España en banco fijo en su haber, lidera ahora el equipo femenino del Boga Club del Mar
RAÚL COSÍN
Guardan una esencia especial los deportes vinculados a los mares, los vientos, el entorno natural y la brega bizarra de los deportistas. Suele advertirse en el mundo de la vela o de las disciplinas náuticas que existe un bicho sin rostro, ni forma, sin efectos ... visibles, pero que cuando uno compite en los mares, lo habitual, es que quede enganchado desde los adentros. El picotazo raramente aleja de las aguas. Todo lo contrario. Arrastra hacia la competición vivaz y respetuosa. Y uno de esos deportes que entremezclan lo bello y plástico del escenario marino y el pulso noble del deportista es el remo. En banco fijo, muy arraigado en el Mediterráneo, lleva diecinueve años en esa pugna con el mar Susana Mut Alemany (Valencia, 27/09/1976). Tiempo en el que ha cultivado la disciplina con toda la pasión posible, pero en el que ha logrado marcar, a modo de concertina en la embarcación, una hoja de servicios con tres Copas de España como remera y otras tantas y un campeonato nacional como entrenadora. En su haber también, un buen número de ligas autonómicas.
«He tenido la suerte de participar con equipos muy competitivos -en su trayectoria ha formado parte de varios clubes dianenses, aunque desde hace unos años encuentra ella y su nuevo club respaldo en la Marina de Denia-. Es fundamental», cuenta Susana. Da la clave: equipo. El remo es fuerza, resistencia, agilidad y velocidad, pero ante todo coordinación. Ocho remeras a bordo del bote. Un timonel. Todos deben ir a una para ganar metros a la victoria. Ella es fundadora del Boga Club del Mar de Denia. Su labor es afinar el movimiento de los remos de sus otras siete compañeras. A bordo, Noemí Amorós, Melina Pérez, Lucía Zhuo, Marta Sánchez, Carmen Braojos, Cristina Vallés e Inma Llácer; Dominik Hulej, al timón; y Rafael de Bustamante, como entrenador.
«Es un deporte que puede llegar a ser tan divertido como duro. Es trabajo, fuerza, resistencia, salen callos en las manos, heridas del roce, te duelen hasta las pestañas… Pero cuando lo pruebas, o lo odias o te enganchas», explica la valenciana.
Susana, que es maestra en su labor profesional, reflexiona sobre este deporte de contrastes: «Hay días que es una gozada. Sales con una brisa y remas encantada de la vida. Pero hay días que es durísimo. Cuando vas a favor de viento, obviamente genial, pero cuando vas en contra piensas ‘y a mí quién me manda estar aquí’».
Una región referente
Está porque se enamoró de esto del remo cuando tenía 18 años. Confiesa que nunca antes había hecho deporte. «De hecho, era la típica que se escaqueada en clase de Educación Física», recuerda. Puede decirse que le abrió las puertas del mundo del remo un joven entrenador de un equipo femenino, que el tiempo y la vida designaron que acabarían casándose.
Los inicios fueron duros. De la nada al todo. Conoció la dureza del entrenamiento. Pero estaba convencida. Trabajaba en dobles sesiones para coger el ritmo y conocimientos del resto de compañeras. Y lo logró. Tanto que Susana es una figura muy respetada.
La Comunidad Valencia es la región más potente en el circuito nacional, que se desarrolla en el Mediterráneo. Avanza ante Cataluña, Murcia y la Andalucía mediterránea. Las medallas se buscan con el llaüt mediterráneo, la embarcación común diseñada para pruebas de fondo de 5.000 metros y en circuitos de 1.400 metros.
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