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La mujer encadenada junto al Palau de la Generalitat para esclarecer la muerte de su hija deja su protesta

La mujer encadenada junto al Palau de la Generalitat para esclarecer la muerte de su hija deja su protesta abc

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La mujer encadenada desde junio al jardín anexo al Palau de la Generalitat para reclamar la exhumación de los supuestos restos mortales de su hija ha cesado en su protesta por recomendación médica pero seguirá reclamando para conocer qué pasó con su hija, a la que se dio por muerta a las horas de nacer.

Práxedes Maxia, durante su acampada de protesta que sinició el 8 de junio, había sufrido dos lesiones en un brazo y en una costilla debido a caídas, motivo por el cual se le ha recomendado que regrese a casa para descansar.

Su denuncia ha sido archivada por la Fiscalía , según ha explicado, aunque sigue con la intención de exhumar los supuestos restos mortales de su hija y para ello se ha puesto en contacto con un laboratorio especializado.

«Me han archivado el caso, pero cueste lo que cueste quiero saber qué pasó con mi hija. Voy a iniciar una acción por mi cuenta» ha añadido Maxia.

Maxia tenía 20 años cuando el 23 de agosto de 1982 ingresó en la antigua residencia Hospital Sanjurjo, el el actual Doctor Peset , para dar a luz a una niña , que según los informes médicos nació con malformaciones, aunque ella recuerda haberla visto al nacer y no observó defecto alguno.

«Si la autopsia que yo he visto no consta en la base de datos del hospital, no se puede dar el caso por cerrado. El parto fue normal, vi a la niña perfectamente y los informes son absolutamente inciertos, ya que en ellos se dice que mi marido y mi madre pudieron ver a la niña, cuando es totalmente falso », ha añadido.

En este sentido, el presidente y abogado de la Asociación SOS Bebés Robados, Enrique Vila, ha lamentado que la fiscal jefe de Valencia, Teresa Gisbert , haya archivado «unas cuarenta denuncias » por bebés supuestamente robados .

Según ha explicado Vila, sólo en la provincia de Valencia se han presentado alrededor de 200 denuncias y aproximadamente la mitad de casos está abierta .

«Del total de las denuncias presentadas en Valencia, aproximadamente el veinte por ciento se han archivado y ni una sola se ha pasado al juez instructor. En cada caso se da un motivo diferente, pero hay algunos en los que la evidencia de delito es clarísima», ha explicado. Este abogado cita el caso de un niño robado cuyo padre ha reconocido que pagó 200.000 pesetas por él y ni siquiera ha sido llamado a declarar por la fiscal jefe.

Asimismo, ha reiterado su intención de presentar una denuncia contra l a fiscal Teresa Gisbert en septiembre por los supuestos delitos de obstrucción a la Justicia y prevaricación , si bien indica que «la tipificación exacta la hará su señoría tras analizar los casos».

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