Ponferrada se enreda con los sueldos

Ponferrada vive estos días un nuevo capítulo de sus ya habituales espectáculos políticos con acusaciones de chantaje , pactos incumplidos, dimisiones.... Aunque son varios los protagonistas del «show», la principal estrella en esta ocasión ha sido la todavía concejala del PSOE, Ángela Marqués, quien ayer compareció de urgencia para confirmar su dimisión como portavoz municipal por lo que denominó como «malentendido» con el resto de ediles de su grupo en las negociaciones del acuerdo con el equipo de Gobierno del PP. «Mi error tiene consecuencias serias y por eso dimito como portavoz», aseguró Marqués. El pacto -sellado por escrito- establecía un total de ocho dedicaciones exclusivas y parciales que finalmente no fueran votadas ayer en el pleno previsto para tal efecto ante la rebelión socialista y también la del anterior regidor, Samuel Folgueral, al que la actual alcaldesa, Gloria Merayo (PP), acusó de querer «chantajearla» al exigir supuestamente y entre otros aspectos que los populares no se presentaran como acusación particular en el caso que investiga las cuentas del pasado Mundial de Ciclismo.

La propuesta de dejar para otra sesión el punto que determinaba el régimen de retribuciones de los cargos públicos municipales partió de la propia regidora, que justificó esta iniciativa por el cambio del sentido del voto del PSOE, al romper el pacto alcanzado de forma unilateral sin dar tiempo a negociar y llegar a nuevos acuerdos sobre esas retribuciones. «Puesto que no era la propuesta de la Alcaldía sino fruto de un pacto que ha sido roto a menos de 24 horas del pleno, propongo que se dejen esos puntos sobre la mesa para que se pueda volver a dialogar y negociar», señaló Merayo.

Mientras, la también exprocuradora socialista Ángela Marqués -que fue ya sustituida como portavoz por Olegario Ramón- trataba de aclarar que desde el PSOE no se oponía a la dedicación parcial al 75 por ciento de 33.750 euros negociada para ella, sino porque consideró que «en conjunto» el gasto que estas retribuciones suponen para el Ayuntamiento es excesivo. La socialista reconoció que han sido «48 horas muy complicadas» para ella, y dejó sobre la mesa que en todo momento fue acompañada a esas reuniones con el su compañero y nuevo portavoz. Además, insistió en que en todo momento informó a sus concejales y a la secretaria local del PSOE, Rita Prada, de la marcha de esas negociaciones.

Mientras, Folgueral reclamó una «retractación pública» de la alcaldesa al asegurar que es «falsa» la denuncia en la que apuntaba a un «chantaje» de su formación imponiendo condiciones para dar su apoyo en el pleno de organización de ayer que finalmente aplazó las votaciones sobre sueldos, informa Ical.