El Ayuntamiento de Segovia subirá el IBI, el agua y la tasa de depuración

Ahora que la crisis parece que deja de apretar y permite aflojar algún agujero del constreñido cinturón, el Ayuntamiento de Segovia obligará a los vecinos a rascarse otro poco el bolsillo. La socialista Clara Luquero debuta como máxima responsable de los Presupuestos -cogió las riendas del Consistorio de la capital del Acueducto el pasado mes de abril, tras la dimisión de Pedro Arahuetes- con una subida de varios de sus impuestos, los que pagan, además, la mayoría de ciudadanos.

El IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles), el agua y la tasa de depuración son los tres tipos elegidos para crecer e intentar insuflar algo de aire a las arcas municipales, en las que el Ayuntamiento prevé ingresar 34.345.531 millones de euros en 2015, un 2,45 por ciento más que en este ejercicio (820.128 euros), según las Ordenanzas Fiscales presentadas ayer.

El mayor volumen, casi la mitad de los ingresos por tributos, llegará a través del IBI. Los propietarios de inmuebles en Segovia está previsto que desembolsen más de 17 millones de euros por este concepto (867.596 euros más que en 2014). El recibo será un 6,8 por ciento más caro que el actual, aunque el Ayuntamiento prevé bonificaciones del 3,5% para los domiciliados (el 73 por ciento se pagan por esta vía). Casi la mitad de la subida se debe a la aplicación de la revisión catastral de 2009, justificó el concejal de Hacienda, Alfonso Reguera, quien achacó el resto del incremento al aumento que fijó el Gobierno central hace tres años con el Real Decreto-ley de medidas urgentes en materia presupuestaria, tributaria y financiera para la corrección del déficit público.

La tasa por el servicio de agua será en torno a un nueve por ciento más cara. En total, el Ayuntamiento espera recaudar por este concepto algo más de cuatro millones de euros, un 11,63% más que este ejercicio, tanto por la subida como por el «aumento» de las altas fiscales. Con lo recaudado, el Consistorio espera costear parte de los 5,3 millones de euros que debe aportar a las obras de ampliación e la estación depuradora de Tejadilla. Pese al aumento, Luquero defendió que el precio del agua se situará en la media regional y sigue siendo de las capitales de Castilla y León más baratas.

La mayor subida la experimentará la tasa de depuración, incluida en el mismo recibo que el alcantarillado y el agua, que casi se duplica. Pasará de 0,29 euros por metro cúbico a 0,43.

Y aunque no varía, las previsiones apuntan a que los ingresos por el IAE (Impuesto de Actividades Económicas) caerán a la mitad, hasta los 1,1 millones de euros.

La regidora defendió que se trata de un incremento «imprescindible» para cubrir las necesidades financieras de las arcas municipales y garantizar los servicios públicos que presta y que la «mayoría» de tributos municipales se mantienen «congelados» de acuerdo a su política de «moderación fiscal».

«En este tema no hay que ser demagogos, no se puede pretender mantener unos servicios públicos de calidad y estar permanentemente exigiendo rebajas fiscales, que es lo que sucede muchas veces con la oposición», justificó Luquero en declaraciones recogidas por Ical. La alcaldesa, quien ya ha anunciado que se presentará como cabeza de cartel del PSOE en las municipales de 2015, aseveró que «lo que nosotros no haremos nunca es lo que ha hecho el Gobierno central» como «pasarse toda la legislatura incrementando los impuestos de manera rotunda y, ahora que se aproxima citas electorales, aplicar una rebaja fiscal».