Un fuerte seísmo de 6,5 en la escala de Richter sacude el centro de Italia

La mayoría de los habitantes de decenas de pueblos del epicentro duermen fuera de sus casas desde el pasado miércoles. En la calle muchos entre lágrimas hablan de haber visto «el infierno». El testimonio de Mauro Falcucci , alcalde de Castelsantangelo, es dramático: «Se ha abierto la tierra, hay humo. Es un desastre». Igualmente, horrorizado el alcalde de Ussita, Marco Rinaldi : «Se ha derrumbado todo, veo columnas de humo. Es un desastre, un desastre. Estaba durmiendo en mi coche, he visto el infierno».

En la capital italiana se ha suspendido el metro y se han sufrido daños las basílicas de San Pablo y de San Lorenzo. Se ha producido más de 200 intervenciones de los bomberos y se han realizado exámenes técnicos en el Coliseo y en varias iglesias y basílicas, como la de Santa María la Mayor.

La Protección Civil confirma que los derrumbes se han producido por todas partes.

Muchas casas y edificios, que se encontraban ya en situación inestable o inhabitable, han sido destruidos con el fortísimo terremoto de hoy. Los del miércoles habían obligado ya a unas 5.000 personas a abandonar sus casas. Están siendo alojadas en hoteles. Afortunadamente, el miércoles no hubo víctimas –solo cuatro heridos leves- porque al producirse el terremoto a las 19,10 los ciudadanos se echaron a la calle y esto les salvó. Gracias a la vigilancia y precauciones adoptadas en los últimos días, con miles de personas alejadas de sus casas, se han evitado muchas víctimas. Con el terremoto de hoy, los expertos estiman que las personas que necesitarán ayuda por haber perdido sus casas, parcial o totalmente, pueden ser decenas de miles.

Muchas carreteras han sido cortadas. En la nacional Salaria se ha interrumpido el tráfico en las dos direcciones desde el kilómetro 112 al 149. Las primeras fotos que se están publicando muestran una gran destrucción por doquier. En Amatrice (Rieti) se ha derrumbado la torre cívica, una de las pocas construcciones que había logrado resistir en el terremoto de agosto. En Arquata del Tronto el alcalde ha manifestado que con la nueva sacudida se ha destruido todo lo que había quedado en pie tras los seísmos anteriores. En Norcia, cuna de San Benito, patrón de Europa, situada a escasos kilómetros de Amatrice, pueblo casi arrasado en Agosto, se ha destruido la basílica de San Benedicto , con los frailes benedictinos arrodillados ante la estatua del santo, mientras los fieles huían despavoridos entre la nube de polvo ocasionada por el derrumbe. Precisamente Norcia ofrece una imagen emblemática de este terremoto: Muchos de los habitantes se han congregado en la plaza central del pueblo, algunos lloran y otros rezan arrodillados. Norcia es también un lugar símbolo, porque sufrió un violento terremoto en 1977 que destruyó la ciudad. Se hizo entonces una reconstrucción antisísmica lo que ayudó a que en el seísmo del pasado agosto se dañaran algunas casas, pero ninguna se derrumbó y no hubo ni una sola víctima. Pero el efecto devastador del terremoto de hoy, sumándose a daños anteriores, ha motivado el derrumbe de casas e iglesias de gran valor artístico e histórico.

Los sismólogos precisan que el terremoto entra en la secuencia sísmica activada el 24 de agosto. Advierten que continuarán las sacudidas, de mayor o menor intensidad, durante varios meses. «Desgraciadamente no estamos en grado de prever cuando y cómo acabará esta secuencia, n podemos excluir otros fuertes terremotos», según precisa en una nota el Instituto de Geología Ambiental. Lo peor hubiera sido –añade la nota- que todos los segmentos de la falla, situada en Amatrice, Visso y Norcia «se hubiera movido conjuntamente, lo que habría generado un terremoto de magnitud al menos de 7,0».

El terremoto de hoy es uno de los más fuertes registrados en Italia en el último siglo , seguramente con la magnitud mayor desde el 1980, año del célebre terremoto que destruyó Irpinia en el sur, causando más de 2.900 víctimas.