Llegada masiva de refugiados en Italia durante la Semana Santa

Prosiguen sin descanso los desembarcos de inmigrantes en Sicilia . Solo en los tres últimos días se han salvado 8.500 personas en el Mediterráneo en 55 diversas operaciones realizadas por naves militares pertenecientes al dispositivo de salvamento de la Unión Europea, o embarcaciones pertenecientes a organizaciones no gubernamentales (ONG).

Desgraciadamente, para los inmigrantes ha sido una semana de pasión, porque la tragedia ha estado presente durante toda la Semana Santa. Ya en el Jueves Santo se produjo un naufragio frente a las costas libias en el que murieron al menos 97 personas y una veintena pudieron ser rescatadas. Después se intensificó aún más la ola de salida de lanchas desde Libia, sobre todo a partir del viernes, día en que fueron salvadas 2.000 personas.

Según el balance ofrecido por Carlotta Sami, portavoz de la agencia de la ONU para los refugiados, en esa jornada se encontraron siete inmigrantes muertos, entre ellos una mujer embarazada , y fueron asistidas numerosas mujeres embarazadas, muchas de las cuales tenían síntomas evidentes de haber sufrido violencias.

Tras las operaciones de rescate frente a las costas libias, las embarcaciones están llegando a los puertos de Sicilia : 4.000 inmigrantes entre el domingo y el lunes . En Pozzallo la Policía identificó a cuatro traficantes de seres humanos, dos senegaleses y dos nigerianos. La llegada masiva ha hecho necesaria la intervención de algunos barcos pesqueros.

Las naves de las organizaciones humanitarias logran rescatar el 40 por ciento de los inmigrantes que naufragan en el Mediterráneo. Cabe destacar que en los últimos días se han acentuado las críticas de los responsables de Frontex (la agencia de la UE que se ocupa de los confines de la Unión Europea) hacia las ONG, acusándolas de « ser utilizadas por los traficantes de seres humanos como taxis ». Los traficantes cargan cada día con más inmigrantes las viejas pateras, y los lanzan al mar sin agua suficiente para beber, casi sin carburante y a menudo sin chalecos salvavidas, aun sabiendo que es muy grande el riesgo de naufragio, porque tienen la seguridad de que serán socorridos de inmediato por las naves de las ONG. Este hecho crea malestar en Frontex.