Así es Cuba hoy
Dos cubanos pasean por las calles de La Habana - afp
Nueva era Cuba-EE.UU.

Así es Cuba hoy

Repasamos cómo se vive en la actualidad en la isla, bajo el embargo estadounidense, y qué cosas van a cambiar

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  1. La nueva etapa abierta

    Dos cubanos pasean por las calles de La Habana
    Dos cubanos pasean por las calles de La Habana - afp

    El mundo vive con optimismo al anuncio de los presidentes de EE.UU., Barack Obama, y Cuba, Raúl Castro, que han explicado su histórico acuerdo con el objetivo de «normalizar sus relaciones» diplomáticas, suspendidas hace 53 años. Sin embargo, esta decisión no supone el fin del embargo de Estados Unidos a Cuba, que debería ser aprobado por el Congreso estadoundiense.

    Aunque aún faltan detalles procedentes de Cuba, ya hay algunas claves ofrecidas por Estados Unidos sobre en qué consistirá su cambio de postura, lo que han denominado el «nuevo enfoque del presidente». Repasamos sobre cómo es Cuba hoy y qué cosas van a empezar a cambiar a partir de ahora. [Puedes ver en esta galería las imágenes de la realidad que viven los cubanos]

  2. La economía

    Fotografía de archivo de uno de los carteles de las calles de Cuba
    Fotografía de archivo de uno de los carteles de las calles de Cuba - reuters

    La primera de las realidades cubanas viene marcada por el doble sistema de moneda. El CUC para los extranjeros, fundamentalmente turistas, y un muy devaluado peso cubano para los oriundos. Este sistema crea una doble economía y numerosos problemas a la hora de que la población pueda acceder a determinados productos. Según nos comenta Alexio, guía profesional, «los cubanos solo podemos pagar con los pesos, que prácticamente no tienen ningún valor. También cobramos nuestro sueldo en pesos, al cambio unos 50 euros. Por 1 CUC te dan aproximadamente 24 pesos cubanos, por lo que todos intentamos cobrar en CUC». Lo curioso es que pese al diferente valor entre ambas monedas, los productos tienen los mismos precios, muy similares a los que nos podemos encontrar en España.

    Eso sí, económicamente algunas cosas mejorarán ahora. Ahora aumentará el nivel de envío de dinero permitido de 500 a 2.000 dólares por trimestre para las remesas que reciben los ciudadanos cubanos desde territorio estadounidense. Además, las instituciones de Estados Unidos podrán abrir cuentas en instituciones bancarias cubanas para facilitar el procesamiento de transacciones financieras autorizadas. El envío de dinero desde EE.UU. para proyectos humanitarios (remesas de donativos) o para respaldar el desarrollo de empresas privadas en Cuba ya no requerirán una licencia específica, como ocurría hasta ahora. Hasta ahora permanecían bloqueadas las cuentas en bancos de Estados Unidos de aquellos ciudadanos cubanos que vivan fuera de la isla, cosa que ahora cambiará.

  3. Los alimentos

    Un restaurante de La Habana
    Un restaurante de La Habana - REUTERS

    Una de las consecuencias del «bloqueo» es la carencia de determinados productos en los mercados. Nos cuenta Alexio que «no es que falten artículos determinados, es que se encuentran o no según lo que haya podido llegar a la isla en esa semana o durante ese mes». Nos pone un ejemplo: «La semana pasada no había posibilidad de conseguir papel higiénico, y sin embargo, esta semana ya lo tenemos».

    Eso sí, hay algún tipo de producto que de forma habitual resulta más difícil de conseguir, especialmente los de higiene personal, según nos cuenta Gladys, diplomada en Ciencias de la cultura Física y el Deporte, y que ejerce como fisioterapeuta en Varadero. «Lo más difícil es encontrar productos de higiene, como compresas o tampones, y también jabón para el pelo, o productos de belleza. Muchos turistas que vienen a Cuba se ofrecen a mandarnos algunas cosas, pero el transporte es demasiado caro, mucho más que el contenido, y además no hay garantías de que lleguen al destino. Las cosas...se pierden por el camino».

    Gladys se considera afortunada por tener este trabajo en un complejo hotelero. Cobra 500 pesos cubanos, pero en propinas puede llevarse unos 50 CUC diarios. Su marido ha ido a pescar esta mañana y «ha tenido bastante suerte, tenemos pescado para toda la semana». Tiene una vivienda propia en Matanzas «de unos 50 metros cuadrados, pero para mi esposo y mis dos hijas es suficiente. Además una de mis hijas está estudiando en La Habana. Esa es una de las ventajas de Cuba. La educación es gratuita, por eso somos muchos los que tenemos una carrera universitaria, aunque después no podamos ejercer nuestra profesión», nos dice.

  4. El turismo

    Una pareja de turistas consulta la ruta de un bus en La Habana
    Una pareja de turistas consulta la ruta de un bus en La Habana - EFE

    Los turistas, y principalmente los españoles, son el objetivo de quienes intentan buscarse un «medio alternativo de subsistencia», ofreciendo sus servicios de guía en plena calle, o indicando determinados locales de ocio y gastronomía a cambio de una comisión por parte de los responsables de estos establecimientos.

    Tampoco pierden oportunidad a la hora de pedir artículos que en España son de uso habitual, pero que en cuba resulta prácticamente imposible además de caro conseguir. Fernando, taxista con orígenes españoles (su abuela era de Murcia), nos ofrece su Cadillac azul para desplazarnos por la Habana. Se convierte en nuestro chófer particular durante todo un día. Nos espera a la puerta de los monumentos y lugares que visitamos. En uno de los últimos trayectos, tras salir de la Fortaleza del Morro, es cuando nos pregunta por algunos artículos. «Muchos turistas como ustedes, que vienen de España, nos traen bolígrafos y cuadernos, para que los niños vayan a la escuela, ¿no tendrán ustedes algo?». Antes de realizar nuestro viaje ya nos lo habían advertido, por lo que le damos una alegría al decirle que en la habitación del hotel tenemos material escolar para sus nietos.

    Por otro lado, hay un cambio importante para Estados Unidos. Se aprobarán licencias para viajar desde este país a Cuba a todos aquellos ciudadanos que vayan a ver a familiares, a asistir a espectáculos públicos, torneos deportivos y demás competiciones y exhibiciones, a actividades de apoyo al pueblo cubano...

    Los viajeros autorizados a viajar desde Estados Unidos a Cuba podrán importar bienes desde Cuba por valor de 400 dólares. De ellos, no más de 100 dólares pueden consistir en productos de tabaco y alcohol. Por otro lado, se permitirá que estos viajeros puedan pagar con tarjetas de débito y crédito en Cuba.

  5. El día a día

    Fotografía de archivo de La Habana
    Fotografía de archivo de La Habana - Reuters

    Este espíritu «emprendedor» o «buscavidas» que tienen muchos cubanos contrasta con algunas actitudes, sobre todo en edificios públicos, donde nos damos de bruces con el funcionariado más rígido.

    En el mismo Museo de la Revolución comprobamos, en parte, los motivos por los que La Habana se ha mantenido estancada en el tiempo. En su puerta de acceso, una persona nos vende la entrada. Pero no nos da cambio, porque para eso está otra persona, en otro mostrador, a tan solo dos metros. Tras hacer la segunda cola para cambiar billetes por monedas y pagar nuestra entrada con el importe exacto, volvemos a la cola del principio donde la funcionaria nos entrega un papel, el que nos da acceso al edificio. Tan pronto como nos damos la vuelta, a un metro de distancia, un tercer funcionario nos recoge la entrada y le corta una esquina, y nos dice que para acceder subamos por la escalera de la derecha. Tres funcionarios en tan solo cinco metros para vendernos, entregarnos, y recoger nuestra entrada. Y ninguno de ellos tenía la menor intención de hacer absolutamente nada más aparte de lo que son sus funciones. Dar el papel, dar cambio, y romper un papel. Unos recursos humanos quizás excesivos, y que, si no fuese por la rígida burocracia, podrían quizás resultar más provechosos en otro departamento.

  6. Las comunicaciones

    Varias personas antienden en La Habana el mensaje de Obama
    Varias personas antienden en La Habana el mensaje de Obama - AFP

    Uno de los principales retos de la etapa que se abre es el de la apertura a internet y a los equipos de comunicaciones.

    Según ha explicado Estados Unidos, aunque el visto bueno final lo tienen que dar las autoridades cubanas, los proveedores de telecomunicaciones podrán establecer en Cuba los mecanismos necesarios para proporcionar telecomunicaciones comerciales y servicios de internet, lo que, según la Casa Blanca, mejorará las comunicaciones entre EE.UU. y Cuba.

    Otro cambio fundamental: se permitirá la venta en Cuba de ciertos dispositivos de comunicaciones, como software, hardware y servicios y artículos relacionados para establecer y actualizar los sistemas vinculados con las comunicaciones.

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