Hazte premium Hazte premium

entrevista

William Kristol: «Obama tendrá tropas de tierra en Irak de aquí a seis meses»

El politólogo cree que la ciudadanía estadounidense asumirá que la amenaza del Estado Islámico hace necesaria una nueva intervención militar sobre el terreno

William Kristol: «Obama tendrá tropas de tierra en Irak de aquí a seis meses» josé ramón ladra

guillermo d. olmo

El analista William Kristol es uno de los comentaristas más reputados de los Estados Unidos. Editor de la revista The Weekly Standard, su voz es el látigo habitual con el que los conservadores azotan a un Obama en horas bajas. Ayer, visitó Madrid invitado por la obra social de La Caixa.

-Ayer mismo vimos el asesinato de un nuevo rehén estadounidense a manos del Estado Islámico ¿Cree que el presidente Obama está dando una respuesta adecuada a esta amenaza?

Él ha dicho que esta gente es malvada y que hay que llevarlos ante la Justicia. Creo que eso está bien, pero también creo que cometimos un error retirándonos de Irak sin dejar tropas allí y un error todavía peor al no intervenir en Siria, dejando que la guerra civil se extendiera sin control y que el Estado Islámico se hiciera con gran parte del terreno. Ahora nos encontramos con una situación muy difícil, mucho más difícil de manejar de lo que hubiera sido hace cinco años. El presidente Obama ha comprometido fuerzas americanas para debilitar y destruir al Estado Islámico. Pero si esta vía intermedia no funciona, espero que sea capaz de intervenir sobre el terreno.

-¿Cree que los ataques aéreos son una medida suficiente para frenar al EI?

Me temo que no. Los militares que conozco me dicen que es necesario tener además fuerzas sobre el terreno. Por otra parte, tampoco con estos bombardeos aéreos estamos haciendo todo lo que podría hacerse. No estoy muy seguro de por qué. Todavía somos un país muy fuerte que podría hacer muchas cosas pero creo que el problema es el presidente Obama. Hizo girar su campaña electoral en contra de nuestra permanencia en Irak, decidió dramáticamente mirar para otro lado en Siria… él está personalmente comprometido en no que no nos impliquemos en las guerras de Oriente Medio. Pero creo que para el pueblo americano es evidente que es necesario actuar y es necesario actuar ya.

-Eso solo lo hará un futuro presidente republicano

No, yo creo que Obama hará más. Como presidente de los Estados Unidos no puede estar viendo como matan a ciudadanos estadounidenses, como mueren civiles inocentes en Siria, como hay matanzas interreligiosas en ese país y en Irak…. Simplemente, no puede quedarse sentado y no hacer nada. A lo largo de la historia América tiende a ser lenta en intervenir. En los Balcanes tardamos tres años en hacerlo. Pero cuando lo hacemos, lo hacemos de verdad. Creo que de aquí a seis meses, con el propio Obama, vamos a ver más ataques aéreos y más tropas. Probablemente, también tropas de tierra, porque no puede permitir que el Estado Islámico controle todo ese territorio, todas esas armas, todo ese dinero. Esa es una situación terrible para Oriente Medio, para Europa y para los Estados Unidos.

-Pero los Estados Unidos ya han librado varias guerras en Irak y después de todos esos esfuerzos el país se encuentra de nuevo sumido en el caos.

Si, porque nos retiramos. El presidente Obama estaba decidido a retirarse y lo hizo. Pero de ahora en adelante tenemos que gestionar la situación. Las cosas eran difíciles hace veinte años, también hace diez y, por supuesto, lo son ahora. Pero somos una gran potencia y tenemos que implicarnos, como hicimos entonces. Si dejamos todo Oriente Medio fuera de control, seguirá exportando terroristas en todas direcciones. En realidad, me temo que no tenemos elección.

-¿Cree que el pueblo americano admitiría una decisión así, una nueva intervención en Irak?

Sí. A nadie le gustan las guerras y a nadie le gustan las guerras no del todo exitosas, pero el público estadounidense entiende que no podemos quedarnos cruzados de brazos, que tenemos que hacer lo mismo que en los Balcanes o en Afganistán después del 11-S. Obama ha dicho que enviará más tropas de tierra a Irak y creo que tendrá un apoyo mayoritario. Nadie quiere hacerlo, pero hay cosas que hay que hacer aunque uno no quiera.

-Se acusa a Obama de ser un líder débil, ¿lo recordará como tal la historia?

Creo que ha sido un líder débil en política exterior, pero en los asuntos domésticos ha sido muy, muy fuerte. Ha perseguido cumplir su programa de una manera muy agresiva. Yo no estoy de acuerdo con ese programa y no creo que haya funcionado para el conjunto del país. Puede que sea recordado como el líder que emergió en un momento en el que el liberalismo era dominante, en el que América se volvía más europea, o, por el contrario, como el líder que intentó una nueva forma de liberalismo pero fracasó y fue derrotado por los republicanos dando paso a una nueva etapa para los neoconservadores. Eso es algo que está todavía en el aire y dependerá de lo que ocurra en las presidenciales de 2016. Lo que creo que es indudable es que sus partidarios pusieron muchas esperanzas en él y ahora se sienten decepcionados. Todo aquello del “Yes, we can”, los grandes lemas, sus ambiciosos planes. Todo eso se vio frustrado. En realidad, no fueron los errores de Obama, han sido los errores del liberalismo contemporáneo. Papá estado no funciona. Obamacare ha fracasado por ese intento de controlar todo por expertos instalados en el centro del poder, de dictar el funcionamiento de la economía. Ha sido un error de los conservadores centrarlo todo en la figura de Obama. A la postre, sus políticas no son más que las políticas de los demócratas en Estados Unidos. Si Nancy Pelosi o John Kerry ocuparan la presidencia, no hubieran hecho cosas muy distintas. Así que, para mí, la cuestión es la ideología, la visión del mundo que hay detrás de esas políticas.

-Hablemos de Rusia y del presidente Putin ¿Son las sanciones suficientes para frenar su agresiva política exterior?

Me temo que no. No parece que lo hayan disuadido mucho. Creo que, al menos, deberíamos estar armando a los ucranianos para permitirles luchar por su país; tienen derecho a defenderse. Lo que tenemos en Rusia ahora es una situación muy negativa, un régimen autoritario triunfante que se permite tomar parte de otro país en Europa, un país cuya soberanía garantizamos hace 20 años cuando aceptó entregar sus armas nucleares. Prometimos defenderles. Es lógico pensar que el resto de países piensen, a partir de lo que ha ocurrido en el este de Ucrania, que no se puede confiar ni en los Estados Unidos ni en la OTAN. Todo esto es muy malo, muy peligroso. No solo por el mensaje que se envía a otros lugares donde Putin se podría ver tentado de intervenir, como Moldavia y los países bálticos, sino por la señal que se lanza a todo el mundo, que vio como el presidente trazó una línea roja en Siria que fue vulnerada sin consecuencias, que vio lo que está ocurriendo en Irak… La conclusión a la que se llega es que puedes agredir a tus vecinos, puedes matar ciudadanos americanos, puedes matar a miles de civiles y no hay consecuencias. Esto es terrible para el mundo. Damos por sentado que todo el mundo quiere la paz, que apuesta por la negociación, por el diálogo, pero todo puede estropearse muy rápido. Creo que el éxito de Putin es muy peligroso y hasta ahora no hemos acertado a hacerle pagar un precio por sus acciones.

-¿Cómo valora el papel jugado por la Unión Europea en la crisis ucraniana?

Los países europeos tienen puntos de vista diferentes y se han visto debilitados por la crisis económica. Nosotros también, pero nos hemos recuperado un poco mejor. Eso tiene consecuencias en política exterior. Ahora Europa, creo, es un poco más débil y muchos países europeos no tienen ni mucho dinero ni energía para hacer frente a Rusia. Por eso el liderazgo americano es tan necesario. Y, de nuevo, Obama está esperando a Europa, Europa está esperando a Obama. Y mientras, Putin… El más firme ha sido el primer ministro canadiense, Stephen Harper. Resulta gracioso para un americano ver a los canadienses, nuestros pacíficos vecinos, ser los más firmes en este asunto. Yo desearía que nosotros mostráramos más fuerza que los canadienses.

-Los republicanos acaban de imponerse en las legislativas ¿Apostaría a que el próximo presidente será un republicano?

Yo diría que las cosas están al 50%. Dependerá mucho de los candidatos y de la gestión del presidente Obama. Soy muy optimista respecto a los republicanos, a pesar de que todavía pagan el precio, con razón o sin ella, de lo que se ve como la presidencia fallida de George W. Bush. El crack financiero fue con Bush y eso ha sido un problema enorme para ellos.

-¿Ve a alguien en el Partido Republicano capaz de derrotar a Hillary Clinton?

Sí. Ella fue la secretaria de Estado de Obama. Se encargó de negociar con Rusia, estaba al frente cuando surgieron los problemas en Siria, era la responsable del asunto iraquí. Ahora puede decir que discrepaba de Obama, pero era la secretaria de Estado y llegó a Washington hace 20 años. Creo que los americanos tienen la idea de que es hora para una nueva era. Ha sido habitual en los últimos años que el candidato más joven ganara y en 2016, por primera vez, el candidato más joven será el republicano, que se enfrentará, probablemente, a una persona que ya lleva mucho tiempo en primera línea. Los republicanos representarán esta vez el cambio.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación