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«Berlín resplandece» para combatir la depresión invernal

La falta de luz solar puede matar en Alemania. La conocida como depresión invernal comienza por estas fechas, pero las autoridades han decidido combatirlo con la iluminación de edificios emblemáticos

«Berlín resplandece» para combatir la depresión invernal reuters

JOSÉ-PABLO jofré

La falta de luz solar puede matar en Alemania. La conocida como depresión invernal comienza por estas fechas cuando lentamente la noche se acerca y ya avanzado el invierno se hace necesario encender las luces a eso de las tres de la tarde. La iluminada navidad alemana es un antídoto al que se ha unido un impresionante espectáculo de luces con el que el Gobierno de la ciudad-Estado de Berlín ha decidido celebrar los 25 años de la caída del Muro.

Edificios emblemáticos de la capital alemana como las estaciones Alexanderplatz, Hackescher Markt o Zoo, las catedrales alemana y francesa, la torre de televisión Fernsehturm o la Puerta de Brandeburgo serán objeto de proyecciones en dimensiones gigantes que mostrarán global e individualmente la historia de Berlín. Son unas 70 iluminaciones distintas en edificios y monumentos que ya han comenzado sus proyecciones (y hasta el domingo 19 de octubre).

El tema es la dinámica del Berlín de los años 20 que tendrá como objetivos principales la avenida Kurfürstendamm, la Columna de la Victoria y el Estadio Olímpico. Según el presidente de la Asociación «Berlín resplandece» y máximo responsable del evento, Andreas Boehlke, «la luz fascina, aporta calidez y energía». El punto central es el Río Spree en el corazón de la capital, en cuyas riberas se alzan el Reichstag, la Cancillería Federal, edificaciones arquitectónicas modernas de empresas e instituciones y la Puerta de Brandenburgo, no lejos de ahí.

Relevo navideño

Desde los ríos, seis barcos proyectarán mientras navegan con equipo especial escenas de la historia de Berlín en las fachadas de los edificios ribereños. El centro comercial Europa Center cumple 50 años y contará durante las noches con un obelisco de luz de 35 metros de alto. El próximo domingo se apagarán estas luces, pero apenas unas semanas después aparecerán las navideñas con sus ángeles, renos y Santa Claus. Permiso para deprimirse, entonces, sólo entrado el enero profundo y sus fantasmas.

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