Anastacia, la resurrección de un ángel
La cantante reunió en Starlite a más de 2.000 personas, se mostró amable, agradecida por el apoyo en los malos momentos, cantó entre el público y anunció nuevo trabajo en noviembre en su vuelta a Sony
Un ángel, venido de Chicago, resucitó ayer en La Cantera de Starlite. Prendada por la belleza del lugar, Anastacia derrochó voz, salud y ganas de vivir en un espectáculo lleno de interacciones, donde los fans pueden hacer preguntas a la cantante y donde la diva no para de hacerse fotos, repartir besos, abrazos, firmas y cariños con aquellos que la han apoyado en los duros momentos de enfermedad y a los que dedicó «Stay». «Gracias por haberme esperado tanto tiempo para verme en directo», dijo al principio del concierto y ante más de 2.000 personas.
Para ese entonces ya se había roto el hielo con «Left outside alone» y «Staring at the sun». Le siguió «Sick & Tired» y remató con «Welcome to my truth», «Seasons change» y «Pieces of a dream». Llegó «Stay» y todos se pusieron a sus pies. Un público entregado que estaba viviendo el sueño de volver a ver a Anastacia, después de que un cáncer interrumpiera su carrera musical.
Tras esta parte, sacó una urna y se eligió tres preguntas. Cada nombre era correspondido con un grito desde la grada. Contestó a las preguntas, se sacó fotos, firmó, posó de la forma más divertida y acabó sonando «Used somebody interlude». Bailó el público de La Cantera mientras Anastacia se quedaba prendada con la belleza de la roca, declaraba amor a España y le decía «guapa», la palabra en castellano que más retumbó sobre la tablas.
Porque para Anastacia, en la llegada de su gira «Resurretion» a Marbella, todo era belleza para completar un concierto de «supervivientes». Su voz es el instrumento musical mas potente del espectáculo , incluso cuando suenan los acordes más emblemáticos del rock con AC/DC, Led Zeppelin o Guns&Roses. La diva mete en medio de su espectáculo versiones de los más grandes del rock , donde la dureza musical y el torrente de voz constituyen una metáfora de la lucha por la vida. Los momentos duros se han superado gracias a la ganas de vivir, representadas en una voz potente, llena de pureza y con infinidad de matices.
El momento rockero acabó con «Sweet child» y «Best of you», para dar paso a un «selfie» con todo el público. Remató con «Lifeline», «Defeated», «Stupid little things» y «Paid my dues». Tras esto se marchó y volvió a salir por petición popular. En el «bis» se bajó a cantar con el público. Sonó «One day in your life» y acabó firmando discos, recibiendo regalos, besos, fotos, abrazos y la histeria colectiva en «I’m outta love».
Resucitó el ángel rubio de la voz inconfundible, agradó a la legión de fans y dejó ganas de más. Después de la larga espera para poder ver a Anastacia en concierto todo momento parecía poco. Pero a la cantante le toca encerrarse en el estudio para grabar un álbum grandes éxitos en noviembre. Será su vuelta a Sony. «La vuelta al dulce hogar», dijo entre bromas.
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