Justin y Selena rompieron antes de comenzar el verano y fue en el periodo estival donde ambos vivieron días de auténtica locura. Primero saltó la noticia de que la actriz había ingresado en un centro de desintoxicación, al parecer cayó en ... las drogas por culpa del canadiense, o al menos eso afirmó ella. Después Bieber se dejó ver con varias chicas, cada día con una.
Pero a principios de agosto llegaron las vacaciones en el Mediterráneo y la locura en su grado máximo. Selena se adentró en el mundo lésbico con Cara Delevingne y aquello no le gustó a Justin, que en esos mismos días recibió un puñetazo de Orlando Bloom en Ibiza.
Alcohol, fiestas, drogas y denuncias acompañaron a los jóvenes durante los ajetreados días veraniegos. Sin embargo, al volver a California se reencontraron en clase de catequesis y volvió a saltar la chispa. Lo que comenzó con un rumor se confirmó con una imagen que subió Bieber a «Instagram», aunque después la eliminó.
Ahora parece que lo suyo va más en serio que nunca. El intérprete de «Baby» ha alquilado una casa en Los Ángeles para irse a vivir con Selena. Se han vuelto tan inseparables que mientras la actriz esperaba para ser entrevistada en «Chelsea Lately», Justin colgó varias autofotos de ellos dos juntos. Sin embargo, borró algunas de ellas y sólo dejó una.
Justin Bieber y Selena Gómez pasean su amor en «Instagram»
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