«Mar Flores está muy afectada, no quiere revivir viejas historias»
El entorno de la modelo cuenta su sufrimiento tras salir de nuevo a la luz su pasado amoroso
beatriz cortázar
Un reportaje en la revista «Vanity Fair» ha despertado los fantasmas del pasado de Mar Flores, quien ahora revive uno de los capítulos más controvertidos de su vida y que se remonta a los años 90. Sobre ese pasado tan solo respondió un par de ... preguntas de una larga entrevista más centrada en hablar sobre sus proyectos. Sin embargo, una de las frases («si un tío sale con tres mujeres es un machote, si eres una mujer y haces lo mismo, una prostituta», decía en «Vanity Fair») y recordar cómo fue el complicado triángulo amoroso entre el conde Lequio, Mar Flores y Fernando Fernández Tapias ha sido abrir la caja de los truenos sin tapones para los oídos.
Mar está muy afectada y muy dolida por todo lo que se está recordando en los medios, especialmente en el programa «Sálvame», donde además colaboran algunos de los protagonistas que vivieron el famoso episodio de la venta de las fotos de Mar y Lequio en la cama de un hotel de Roma cuando la modelo salía con el empresario gallego; tiempo más tarde, esas fotos aparecieron en la portada de «Interviú». Aquel escándalo ocasionó el ingreso de Mar en las urgencias de La Paz. Y es que cuando aparecieron las imágenes, Mar ya estaba saliendo con Cayetano Martínez de Irujo, relación que la duquesa de Alba siempre criticó. Y aunque es verdad que el jinete se portó al final como un caballero, acabaron rompiendo y Mar volvió con un ex, el empresario Javier Merino, junto a quien se ha convertido en esposa y madre.
Este es el resumen de unos años turbulentos que sacudieron a la modelo de la cabeza a los pies. Recordar aquellos momentos «la está doliendo muchísimo», cuenta un íntimo. «Mar está muy afectada, no solo porque no quiere revivir esas historias sino porque hoy sus hijos, especialmente el mayor, que ahora se ha instalado con ella, se enteran de todo y a veces se cuentan las cosas de manera muy injusta», añade. «La verdad de todo se la podrá demostrar a sus hijos con documentos que Mar jamás ha mostrado en público, pero el daño ya está echo. La atención mediática la está machacando», asegura. La modelo no quiere hablar sobre este asunto, sólo insiste que la entrevista de «Vanity Fair» no se hizo para levantar viejas historias, sino para hablar de sus planes, y se indigna al ver cómo la critican quienes participaron en una trama que la destrozó psicológicamente.
Otro tipo de destrozo es el que contemplo en la actriz Nastassja Kinski, antaño uno de los rostros más interesantes del cine . La hija de Klaus Kinski viajó a Madrid, junto a su hija Sonia, para acudir a la fiesta que Sony organizó en el Jardín Botánico. Se trataba de reunir a madres e hijas en una exposición muy curiosa. Allí estaban Ángela Molina con Olivia, Eugenia Fernández de Castro con Brianda o Lydia Delgado con Miranda. Gonzalo Miró, Juanjo Oliva o Ane Igartiburu se apuntaron al cóctel, que ha supuesto la vuelta a la vida social de la ex miss España Vania Millán. «He estado tres años encerrada opositando para Registrador de la Propiedad, pero lo he dejado. Ahora trabajo en un despacho de abogados y soy feliz», cuenta.
«Mar Flores está muy afectada, no quiere revivir viejas historias»
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