«Angelina no podía guardar en secreto su operación»

Cuando el pasado mes de mayo Angelina Jolie anunció a través de una tribuna publicada en «The New York Times», y bajo el título de «Mi elección médica» , que se había sometido a una doble mastectomía preventiva, la noticia cayó como una bomba y puso sobre la mesa las incertidumbres a las que se enfrentan miles de mujeres cuando sufren un cáncer o tienen cierta seguridad de que podrían padecerlo. Llegada la calma, muchos se interesaron en Kristi Funk, la cirujana que llevó a cabo las operaciones en el Pink Lotus Breast Cancer Center de Beverly Hills y que asesoró a Jolie antes, durante y después del proceso. Entonces, Funk se limitó a compartir en la web de su clínica la versión médica del procedimiento y las diferentes etapas del tratamiento de la actriz.

«Ella calculó el momento»

Ahora, tres meses después, la cirujana ha desvelado a la revista «Los Angeles Magazine» cómo fue su experiencia personal con la estrella. En una extensa entrevista, defiende su decisión de hacer pública una opción tan controvertida: «Ella es muy reservada, pero calculó el momento en que estaría lista para desvelar algo tan personal », explica Funk, quien ocupa la portada del número de septiembre de la mencionada publicación. «Por su naturaleza filantrópica , siempre supo que no podría guardar este secreto y seguir siendo quien es», añade la cirujana. Funk, además, explica que «cuando alguien que sin duda es la mujer más bella del mundo se extirpa la parte de su cuerpo símbolo de la femineidad y la sexualidad, uno se tiene que preguntar por qué lo hace». Además, dice que Jolie buscó el momento adecuado , tanto para su vida profesional y personal como «para su alma», para someterse a la doble mastectomía.

Amiga de los famosos

En la entrevista, la doctora Funk también aborda otros aspectos de su relación con Jolie, como la presión de llevar a cabo un tratamiento que iba a ser escrutado analizado al detalle; o la relevancia de que personas como ella, a la que tantas mujeres admiran, hablen abiertamente sobre sus enfermedades. «Es imprescindible, pues simplemente resulta más fácil para la gente escuchar a alguien a quien adoran y en quien confían. Y eso es lo que son las celebrities», señala.

En cierto modo, la propia Kristi Funk también es una celebridad : ha aparecido en decenas de programas de televisión como asesora médica y su presencia es muy solicitada en eventos médicos.

Angelina Jolie se sometió a la complicada cirugía preventiva para minimizar sus opciones de padecer cáncer de mama, dado que es portadora de un gen defectuoso, el BRCA1, y que provocó la muerte tanto de su madre como de su tía materna. La actriz, directora y productora explicó entonces que contaba su historia para que las mujeres en una tesitura similar se pudieran beneficiar de su experiencia y para presionar a Myriad Genetics, la compañía que en ese momento aún tenía la patente de los genes BRCA1 y BRCA2, para que abaratara el precio de las pruebas necesarias para detectarlos.