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Así actúan las bandas de reventas que hacen negocio con los abonos del Real Madrid

La cita, el pago en metálico, la devolución... todo está perfectamente diseñado para no ser sorprendidos por el club

A la izquierda, los carnés intervenidos por la Policía; a la derecha, Messi y Cristiano en el clásico
M. J. Álvarez

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La operación policial , a instancias del Real Madrid, ha destapado una red de intermediarios y reventas que cada partido hacen negocio con los abonos de socios del club blanco. Hasta ahora actuaban con completa impunidad : se paseaban por los alrededores del estadio antes y después de los partidos y, a la vista de todo el mundo, reparten sus tarjetas con un número de teléfono de contacto. El mensaje a los abonados es claro: «Si estás interesado, te alquilo por un pastón tu carné para ver tal partido».

No son pocos los socios y abonados madridistas que caen en la tentación. Sólo durante la pasada semana, la Policía intervino 635 carnés de socios que habían hecho negocio con el partido del Barcelona. Para dicho encuentro, los reventas ofrecieron entre 500 y 700 euros a los interesados. Se desconoce por cuánto lo realquilaron ellos, pero fuentes policiales detectaron a aficionados que llegaron a pagar hasta 3.000 euros para ver en directo el clásico en una buena localidad.

Los abonados que pican el anzuelo contactan con los reventas y se ponen en sus manos para seguir sus instrucciones. La premisa es clara: elegir un lugar cerrado para no ser sorprendidos. Normalmente, la cita suele tener lugar en algún hotel cercado al Santiago Bernabéu, justo después del partido anterior al que se pretende hacer negocio. De esta forma los reventas cuentan con unos quince días, aproximadamente, para ofrecer el carné en el mercado negro.

Los lugares más frecuentados para el intercambio suelen ser hoteles situados en el entorno de la Plaza de Castilla. En ese momento, reciben el dinero por adelantado – «a tocateja» , reconocen a ABC– a cambio de entregar el carné. Cuanto más importante es el encuentro, más ganancias obtienen todos, ante la escasez de entradas.

Cientos de carnés

Una vez que concluye el partido, el intermediario y el socio vuelven a citarse una semana después del choque (siempre y cuando el equipo no vuelva a jugar enseguida en el estadio), aunque esta vez el encuentro se produce en un despacho, oficina o portería , ya que las bandas acostumbradas a este tipo de «negocios» suelen acumular cientos de carnés y no pueden quedar uno a uno con todos los socios implicados. Allí les devuelven el carné para que lo puedan seguir disfrutando.

Esta pasada semana, la Policía irrumpió en una portería de un edificio de la calle de Ríos Rosas donde se incautó de más de 300 pases. El club madridista , ante el uso indebido de los abonos por parte de los titulares, remite, como así ha ocurrido esta semana, una carta en la que les anuncia la apertura de un expediente disciplinario para depurar responsabilidades. Dicho expediente puede acabar con la retirada temporal o definitiva del carné al abonado. Además, puede denunciarle por uso indebido ya que el titular del pase es el Real Madrid. El socio, aunque lleve toda la vida como abonado del club, sólo es el arrendatario de un carné que se saca a principio de cada temporada y por el que hay tortas, ya que el club tiene listas de espera desde hace años.

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