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450 conatos de incendio amenazan la provincia de Orense en ocho días

La Xunta avanza ayudas de emergencia para paliar los daños causados por el fuego

Zona calcinada en San Cristovo de Cea EFE

ABC.es

Las altas temperaturas de los últimos días han vuelto a colocar sobre los incendios el foco de atención, con un territorio especialmente castigado en este verano, el de la provincia de Orense. Sin ir más lejos, según las estimaciones oficiales, en los últimos días se produjeron 450 conatos de fuegos. Ante estas cifras, la Consellería de Medio Rural celebra que no haya habido más que hayan derivado en grandes fuegos , y achaca esto al buen funcionamiento de los servicios de emergencia y al alto grado de coordinación y respuesta de los mismos.

Los dos incendios más graves que se dieron en el día de ayer fueron los de San Cristovo Cea y Verín —ambas localidades de la provincia interior—, en las parroquias de Oseira y Tintores respectivamente, ya controlados. El más grave de los dos fue el acontecido en Cea, donde las últimas estimaciones hablaban de 170 hectáreas quemadas . Por su parte, en el de Verín fueron unas 36 las hectáreas afectadas, pero durante horas se llegó a activar la situación 2 de emergencia debido a la proximidad de las lapas con las casas de la zona.

Reunión con alcaldes

Por su parte, la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez , se reunió ayer con los alcaldes de alguno de los municipios más afectados por el fuego en este mes de agosto, tales como Avión, Pobra de Trives —ambos en Orense—, para analizar los estragos ocasionados por los mismos en las pasadas semanas. Del mismo modo, exploraron las diferentes posibilidades para regenerar el monte y recuperar el patrimonio perdido .

Después del encuentro, Vázquez anunció que el decreto de emergencias y la línea de ayudas para reparar los daños se llevarán al Consello de la Xunta con la mayor prontitud posible, a fin de empezar a trabajar cuanto antes en las labores de recuperación medioambiental y de las infraestructuras afectadas. El desafío de las próximas semanas está en que las futuras lluvias no provoquen corrimientos de tierra ni la consiguiente contaminación de las aguas. Con esta reunión, Medio Rural terminaba la ronda de contactos con los municipios en los que se tuvo que activar la situación 2 de alerta. Para concluir su intervención, Vázquez pidió que los incendiarios «paguen por el daño provocado».

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