Hazte premium Hazte premium

Alberto Caparrós - CRÓNICAS SABÁTICAS

Pelayo, «héroe» de los valencianos

«Los empresarios están empecinados en cambiar una imagen que ha resultado lesiva para los intereses de la Comunidad»

Imagen de archivo de Pelayo Díaz Zapico ÓSCAR DEL POZO
Alberto Caparrós

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El vídeo de Pelayo Díaz Zapico (Oviedo, 1986) instando a una mujer de origen francés a que se «vuelva a su país si no le gusta Valencia» se ha tornado viral y ha convertido al estilista - de acuerdo con su presentación en Twitter- en una suerte de «héroe» para los valencianos.

La trifulca televisiva entre el estilista y una candidata a concursante que echó pestes de Valencia y de los valencianos y la enconada defensa de Díaz Zapico sirve de metáfora de lo que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig , ha denominado «hipoteca reputacional» .

Como toda generalización acarrea injusticia, la Comunidad Valenciana arrastra desde hace años el sambenito de tierra de corruptelas y desmanes en un «levante feliz» entre copiososas paellas y tumbonas en la playa. Entre mofas y clichés, más de 1,94 millones de valencianos se levantan todos los días para acudir a su trabajo y otros 490.000 sufren la lacra del paro, de acuerdo con los datos puestos este jueves negro sobre blanco en la Encuesta de Población Activa (EPA).

Los empresarios valencianos están empecinados en cambiar una imagen que ha resultado lesiva para los intereses económicos de la región y miran de reojo los acontecimientos que se suceden en Madrid encaminados a la investidura de Mariano Rajoy y la posterior formación de Gobierno.

Un dirigente empresarial con mando en plaza en Valencia cuenta con cierto poso de amargura que se daría con un canto en los dientes si en el nuevo Ejecutivo figura algún secretario de Estado de raíces valencianas . Hace cinco años, relata el interlocutor, se sucedieron las reuniones para ejercer de «lobby» de presión para propiciar que en la libreta de Rajoy apareciera algún ministro de la tierra. Lo más cercano a las pretensiones de los empresarios fue la designación de José Manuel García Margallo , madrileño de nacimiento, pero cabeza de lista del PP por Alicante y veraneante en Jávea que, para colmo, ocupa una cartera -Exteriores- que no afecta directamente a los intereses regionales. Los empresarios aspiraban a contar con interlocutores directos en Fomento, Economía o Hacienda .

Ahora, a diferencia de lo que ocurrió en 2011, no se están registrando movimientos . Tal vez por el hastío que han supuesto los cerca de once meses de Gobierno en funciones, se ha optado por esperar a conocer la lista que elabore Mariano Rajoy con los dedos cruzados a la espera de que haya suerte y entre los dirigentes que han de tomar las decisiones que afecten a la Comunidad Valenciana en materias como la financiación autonómica o infraestructuras haya alguien que conozca el terreno sin necesidad de tomar el AVE en Atocha y que defienda sus intereses como algo propio.

Hasta entonces, a los valencianos siempre les quedará su particular Pelayo.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación