El «top manta» vuelve a invadir las aceras de Barcelona

Llega el buen tiempo y regresan los problemas de la venta ambulante en Barcelona. Los vendedores del «top manta» hace días que campan a sus anchas por el barrio de la Barceloneta . Si el año pasado se ubicaban frente al paseo de Colon y en el paseo Joan de Borbó – hasta que el consistorio instaló una pista para «skaters» para llenar las aceras y que no pudieran estar allí –, los «manteros» ya intentan hacer su negocio este año a primera línea de mar, ante la playa de la Barceloneta o en las Ramblas.

Pareos y toallas son los objetos predilectos de este año, dejando espacio también para gafas de sol, camisetas del Barça, zapatillas deportivas y palos de «selfie». Además de los habituales vendedores que esperan clientes con la manta, los hay, como otros años , que prefieren pasear por la arena para ir vendiendo sus productos, desde ropa playera hasta comida o bebida. La historia, un año más, parece que se repite.

La poca mano dura que el Ayuntamiento tuvo el año pasado para apaciguar esta problemática llegó a enfadar mucho a los comerciantes del centro, y este año la problemática parece que podría repetirse. Esta misma semana, el presidente del PP en el Ayuntamiento, Alberto Fernández, lamentó la «falta de diálogo» y la «permisibidad» de Ada Colau con el top manta. En este mismo sentido, el PP exigirá la semana que viene en comisiones municipales implantar un plan de choque contra este fenómeno.

El portavoz del grupo Demòcrata, Joaquim Forn, lamentó ayer la «inoperancia y la falta de acción» del gobierno en este asunto. «Es la crónica de una muerte anunciada. Sabemos lo que pasará en los próximas días y meses», sentenció. En una línea similar se mostró la líder municipal de Cs, Carina Mejías, cuyo grupo llevará a las comisiones un ruego para impulsar una campaña de protección del comercio de proximidad y también una pregunta sobre la evolución de los planes de empleo destinados a «manteros».

Ante las críticas, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, aseguró ayer que se actuará de «de forma decidida para evitar que la venta, cuando no sea autorizada, se pueda producir» con «intervenciones preventivas para evitar que se produzcan ocupaciones intensivas del espacio publico».

Pisarello comentó que el gobierno prevé «la actuación en el espacio publico» para evitar «saturaciones intensivas que afecten a la libre circulación y puedan afectar a otras actividades comerciales» . Además, defendió que el Ayuntamiento está «muy comprometido» en dar salidas a los manteros , pero dejó claro que actuará de forma decidida.