Cs aspira a gobernar Barcelona fidelizando el voto del 21-D
Mejías pide a este 2018 acabar con la incertidumbre política y reforzar la reputación de la ciudad
Ciudadanos arranca el año con el propósito de conseguir ampliar y fidelizar los votos que la formación naranja consiguió el pasado 21-D en Barcelona para encarar ya las elecciones municipales de 2019 con un proyecto de ciudad consolidado. Así lo explicó ayer la presidenta de su grupo, Carina Mejías, en un desayuno de trabajo con periodistas, en donde recordó que en las recientes autonómicas su partido consiguió casi el 24% de los votos en la ciudad y se convirtió en el más votado en siete de los diez distritos.
Reconociendo que las dinámicas de voto suelen cambiar en función de si los comicios son estatales, autonómicos o municipales, y dejando claro que quiere repetir como alcaldable para Ciudadanos -la formación hará para ello unas primarias que todavía no están concretadas-, Mejías se plantea este 2018 como un año para que su programa y proyecto para la capital catalana cuajen entre quienes les votaron el 21-D. El partido naranja reforzará especialmente su trabajo en el Ensanche, Sants-Montjuïc y Gracia, los distritos en los que las formaciones independentistas obtuvieron más votos que ellos.
«Acabar con la incertidumbre política» en la capital catalana es otro de los grandes retos que tiene sobre la mesa Cs porque «Barcelona necesita estabilidad política, económica y social» , aseguró la edil naranja. Junto a esto, Mejías se mostró confiada en dar un giro a la reputación de Barcelona y a «generar mejores condiciones económicas y sociales para que no se marche ni una empresa más y para que las que lo han hecho vuelvan».
Administración más ágil y políglota
En este sentido, Mejías propuso implantar un plan especial de mejoras fiscales y financieras para negocios empresariales así como poner en marcha una campaña de promoción de la «marca Barcelona». Además, apostó por capacitar la administración local para que sea más ágil y políglota e instó a promover el trilingüismo, todo ello también para dar más facilidades a posibles nuevos inversores.
En cuanto a políticas sociales, Mejías espera reforzar la promoción económica para conseguir más puestos de trabajo y exigió impulsar un plan de vivienda pública, que ayude a rebajar la problemática en este campo con la ampliación del parque disponible y la consiguiente bajada de precios.
Por otro lado, la líder de Cs incidió en que «tras tres años de paralización de la ciudad, ha llegado el momento de poner Barcelona en marcha». Así, tras la reciente reactivación de los trabajos en La Sagrera, Mejías confía en que se desbloquee el conflicto en Glòries y en que los nuevos proyectos de movilidad se hagan ofreciendo alternativas reales al transporte privado. Además, insistió en que la unión del tranvía no es prioritaria, especialmente ahora que hay otros grandes proyectos de ciudad en el aire.
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