La soledad del corredor de fondo

Los resultados de las elecciones generales en Cataluña incitan poco a pensar que el clima político pueda favorecer la vuelta de las corridas de toros a la comunidad.

Aunque bien mirado, ni con este mapa político ni con otros aparentemente más favorables, los aficionados nunca tuvieron una verdadera asa a la que agarrarse. En Cataluña sigue activa una resistencia que ha sentido siempre sobre su piel la fría soledad del corredor de fondo. Los políticos porque desertaron de la defensa de la Fiesta y el propio sector taurino porque nunca ha dado el mínimo apoyo a quienes en esta tierra se siguen batiendo el cobre y poniendo la cara por delante para defender algo en lo que creen. Por justicia, por tradición y por cultura.

Por eso, los aficionados mantienen su carrera. Solo hay que echar un vistazo a lo que se vive en esta Cataluña taurina de norte a sur. El pasado fin de semana en la gerundense Olot la peña de la Garrotxa rindió homenaje a su torero, el novillero Abel Robles, al que se sumaron entidades taurinas de Figueres, Lloret de Mar y Manlleu; y con la vista por delante, el próximo domingo en el campo municipal de Llefia, en Badalona, tendrá lugar el V encuentro de fútbol que enfrenta a aficionados y toreros catalanes con el beneficio social de recoger juguetes y alimentos.

Y por si fuera poco, la Federación de Entidades Taurinas de Cataluña ha anunciado, entre otros acontecimientos, su ciclo de conferencias para los domingos de enero y un festival taurino que se celebrará en el exilio, en la plaza de toros de Alcañiz (Teruel) el 6 de marzo con la intervención de los matadores Serafín Marín y Jesús Fernández, el novillero Abel Robles y el aficionado práctico José Ponce.

Todo esto, y mucho más, en un entorno hostil que hace que, pese a la fría soledad impuesta por políticos y por figuras, ganaderos y empresarios taurinos, el toreo siga aquí activo, y que apenas dé para recordar la goleada podemita, el avance de ERC, el batacazo de PSC y PP, y el frenazo de los hombres de Albert Rivera, aquel al que sacaron a hombros de la Monumental una tarde de septiembre.