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Arte

Cuenca y Toledo acogerán la obra de un coleccionista de arte moderno a partir del verano de 2018

El cubano Roberto Polo desembarcará en la región con más de 7.000 piezas

El coleccionista Roberto Polo con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page JCCM

J. A. PÉREZ

Roberto Polo (La Habana, 1951) era un desconocido fuera del mundillo del arte hasta que el periódico El País ha publicado que el coleccionista cubano va a ceder de manera altruista toda su obra, formada por más de 7.000 piezas de arte moderno y contemporáneo, a Toledo y Cuenca. Se trata de un «bombazo cultural» , según el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que ha confirmado la noticia y dicho que es la colección «más importante del mundo» de estas características. El acuerdo entre Polo y el Gobierno regional será presentado públicamente el próximo martes.

Las más de 7.000 obras se expondrán en el Museo de Santa Fe de Toledo y en el antiguo Archivo Provincial de Cuenca , ambos cerrados ahora mismo. En Toledo la colección se abriría al público en el verano de 2018, mientras que para verla en Cuenca habría que esperar hasta finales de 2019 o principios de 2020. La idea de Polo es enviar primero una avanzadilla de unas 500 de sus obras, la mitad para cada ciudad, y que estas se vayan exponiendo de forma rotatoria. Y poco a poco irían llegando el resto, siempre según la información publicada por El País.

Polo es un millonario y descendiente de gallegos emigrados a Cuba que huyeron de la isla a Estados Unidos en 1961 cuando la revolución castrista empezó a confiscar propiedades. En el mercado del arte es conocido como «The Eye» (El Ojo) por su intuición para acertar con las nuevas tendencias y su colección se nutre de las vanguardias del centro, este y norte de Europa, así como de EEUU. Entre sus autores figuran Moholy-Nagy, Schmidt-Rottluff, Schlemmer, Schwitters, Max Ernst, Vantongerloo o Paul Joostens.

Que este cubano iba a instalar su obra en España se sabía desde hace, al menos, un año. Lo que se deconocía era el lugar (o lugares) escogido. Hace unos meses, cuando el suplemento «Fuera de Serie», del periódico El Mundo, le preguntó por el destino, Polo dijo: «No puedo decirlo. Pero es una ciudad que para mí representa la grandiosidad de España en el plano artístico e intelectual. Tiene obras de arte fabulosas, pero carece de arte moderno. La fórmula que propone una de esas comunidades autónomas es muy sugerente: repartir la colección en dos museos diferentes situados en sendas ciudades de la región. Un espacio abarcaría obra desde comienzos del siglo XX hasta nuestros días, y otro más pequeño estaría consagrado al arte contemporáneo más reciente».

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