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Crónica de un año de coronavirus en Castilla-La Mancha

De los respiradores turcos a los test rápidos, del confinamiento al cierre perimetral y de los bares, y de la falta de material de protección a la vacuna

Juan Antonio Pérez

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1º Cipriano Pardo, el primer caso

Cipriano Pardo Parreño, de 62 años y vecino de Marchamalo, fue el primer paciente diagnosticado con coronavirus en Castilla-La Mancha . El 27 de febrero se encontraba realmente mal, la fiebre era alta y a veces como que no podía respirar; empezaba a toser y se ahogaba. Ese día fue ingresado en el hospital de Guadalajara. El 28 empeoró y pasó a la UCI, siendo intubado. Le hicieron la prueba del covid y se confirmó el positivo.

El domingo 1 de marzo la Junta lo hizo público, aunque no desveló la identidad del enfermo. Cipriano pasó un mes justo en la UCI, hasta que falleció el 28 de marzo. Meses después, en junio, ABC contactó con su hija Milagros, que contó en exclusiva la triste historia de su progenitor en un reportaje titulado: «La historia del paciente cero de coronavirus en Castilla-La Mancha» .

Cipriano Pardo, de 62 años y el primer caso, moriría el 28 de marzo ABC

Tras ese primer positivo, los casos se multiplicaron de forma exponencial. El miércoles 11 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia. Ese día, cuando en Castilla-La Mancha ya se habían confirmado 69 casos, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, y el director general de Salud Pública, Juan José Camacho, descartaron tomar medidas drásticas, más allá de «limitar» los saludos, los viajes o las visitas a centros de mayores y hospitales. Hay que recordar que el lunes 9 la Comunidad de Madrid había decidido que, ante la expansión del coronavirus, cerraba los centros escolares desde el miércoles 11.

El jueves 12 de marzo la Junta comunicó el primer fallecido, una mujer de 82 años de la provincia de Albacete. También ese día el presidente regional, Emiliano García-Page, compareció públicamente dos veces: antes y después de comer. Por la mañana aseguró que no se iban a cerrar los centros escolares: «Vivimos en una sociedad abierta, que no ha decidido confinarse, que no ha decidido encerrarse en casa y, por consiguiente, tan de riesgo es que los niños jueguen en un parque a como jueguen en un recreo. Punto. Y hay que hablar claro a la gente, y sobre todo a la gente que lo que pretende es tener 15 días de vacaciones ». Por la tarde se desdijo de lo dicho y suspendía la actividad escolar.

El viernes 13 el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba el estado de alarma y el confinamiento de España, que entró en vigor al día siguiente.

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Imagen de la sala de espera de Urgencias del hospital de Albacete, atestada de pacientes Sescam

2º Falta material de protección

En los primeros días del confinamiento la Junta de Castilla-La Mancha se esforzó por trasladar a la población un mensaje de tranquilidad. El viernes 20 de marzo la directora general del Sescam, Regina Leal, compareció para asegurar que había 1.170 camas libres en los hospitales, «un escenario muy positivo». El sábado 21 Fernández Sanz negaba que las Urgencias estuvieran «aglomeradas» y el jueves 26 Page afirmó: «Hemos tenido una capacidad de respuesta extraordinaria» .

Como suele ocurrir, las declaraciones políticas van por un lado y la realidad... por otro. La propia Junta tuvo que admitir que había suspendido la actividad programada en los centros sanitarios debido a la pandemia y también se aprobó una orden por la que se autorizaba a contratar médicos y enfermeros jubilados menores de 70 años.

Además, ya en aquellos días se hacían virales (nunca mejor expresado) mensajes de trabajadores sanitarios quejándose de la falta de material de protección. Por ejemplo, Rosa García, profesional en las Urgencias de Albacete, denunciaba desesperada en un audio: «Todo lo que os han contado es cierto, incluso más».

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Llegada de los respiradores desde Turquía a Madrid EFE

3º Los test rápidos y los respiradores turcos

El sábado 28 de marzo Page anunció que la Junta había recibido 5.850 de los 60.000 test rápidos que había comprado a un proveedor español y que se comenzarían a hacer a partir del día siguiente. Castilla-La Mancha era así la primera comunidad en utilizar esta prueba que detecta el covid en 15 minutos con una muestra de sangre.

Pocos días después hubo polémica por los 150 respiradores comprados por la Junta y bloqueados por el Gobierno turco en la frontera . Castilla-La Mancha tuvo que buscar un plan B y, gracias a la intermediación de una empresa valenciana, la primera remesa de estos aparatos llegó el 9 de abril a Barajas. Page y Fernández Sanz se personaron en el aeropuerto en un claro gesto de oportunismo político.

Luego la oposición del PP cuestionó «la idoneidad» de los respiradores «tras las quejas de reputados profesionales de la sanidad». Fernández Sanz aseguró que tenían el aval CE (Conformidad Europea) y que servían para lo más importante: «para ampliar la capacidad de respiración».

Por otro lado, a mediados de abril el Ministerio de Sanidad ordenaba la retirada de las mascarillas del modelo Garry Galaxy de envase verde al ser defectuosas. Para entonces el Sescam ya había distribuido más de 26.000.

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En la residencia «Elder» de Tomelloso murieron 75 ancianos entre marzo y junio ABC

4º El drama de las residencias

Todo el mundo coincide en que el gran drama del coronavirus ha sido la gran cantidad de ancianos muertos en las residencias de mayores. El goteo durante la primera ola fue desolador. La residencia «Núñez de Balboa» de Albacete capital informó de 22 muertos, la residencia «Elder» de Tomelloso de 15, la residencia «La Fonda Oriental» de La Roda de 12... y así hubo unas cuantas.

En algunos casos los gestores se enfrentan a procesos penales. En la residencia «Elder» murieron 75 ancianos entre marzo y junio. Un grupo de familiares de los fallecidos presentó una denuncia en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Tomelloso, que abrió diligencias para investigar los posibles delitos de homicidio por imprudencia y de omisión del deber de socorro.

Según la contabilidad oficial de la Junta de Castilla-La Mancha, más de 2.000 ancianos han fallecido de coronavirus en las residencias durante la pandemia.

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En Tomelloso llegó a haber hasta 15 entierros diarios Guillermo Navarro

5º Tomelloso, epicentro del virus

Tomelloso, un municipio de unos 35.000 habitantes, se convirtió en el epicentro del coronavirus en España por la monstruosidad de fallecimientos registrados. Según los datos del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, en marzo y abril hubo 319 licencias de enterramiento, de las que 150 tenían asignada el covid como causa de la muerte y en otras 141 había sospechas. Es decir, 291 sobre 319, un 91,2% del total.

«En fila india, uno tras otro, así hemos tenido que enterrar a los fallecidos durante tres semanas sin un solo día de descanso», contaba un operario del cementerio municipal en un reportaje de ABC. Y aseguraba que había habido días con 15 entierros.

El 2 de mayo Page compareció en las Cortes de Castilla-La Mancha para dar cuenta de su gestión de la pandemia y, entre otras cosas, afirmó que el paciente cero en la región había sido una persona que había viajado desde Tomelloso a La Rioja. Allí se contagió, y a su vuelta ese mismo paciente habría infectado a entre 30.000 y 50.000 personas.

El resto del año Tomelloso siguió generando noticias. A finales de mayo, con el país aún en estado de alarma y en plena desescalada, un macrobotellón con al menos 500 jóvenes celebrado en este municipio acaparó portadas en los medios de comunicación de ámbito nacional.

En diciembre Iván Rodrigo , teniente de alcalde de Tomelloso y diputado regional del PSOE, votó a favor de un conjunto de propuestas del PP entre las que se pedía una UCI para el hospital del municipio. En las filas socialistas se mostraron indignados con Rodrigo por su indisciplina y se aseguró que se le abriría un expediente.

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Sara Bravo de 28 años, trabajaba como médico en Mota del Cuervo ABC

6º Los jóvenes también mueren de covid

La de Sara Bravo López fue una de las muertes que más impactó en la primera ola de la pandemia. La joven médico de familia de 28 años trabajaba en el centro de salud de Mota del Cuervo, se contagió durante un servicio de Urgencias y falleció tras estar ingresada varios días en el hospital Mancha Centro de Alcázar de San Juan. Su madre, Teresa López Pernía, formó parte de la delegación que en octubre recogió el Premio Princesa de Asturias de la Concordia, que recayó en los sanitarios que siguen luchando en primera línea contra el coronavirus.

Se desconoce a ciencia cierta cuántos profesionales han muerto de covid. A finales de abril el sindicato CESM aseguraba que en Castilla-La Mancha eran, al menos, 16. El primero de la lista fue Santos Julián Martínez , de 65 años, secretario general del Colegio de Médicos de Albacete. Mientras, Ana Figueras , de 58 años y médica en Malagón, ha sido la última víctima de la que se ha tenido noticia. Además de médicos, no hay que olvidar a otros profesionales como enfermeros, auxiliares de enfermería o farmacéuticos.

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El comercio y la hostelería de las provincias de Cuenca y Guadalajara pudieron abrir antes que el de Toledo, Ciudad Real y Albacete EFE

7º Desescalada por fases

Tras dos meses de confinamiento, el Gobierno diseñó en mayo un «Plan de Transición hacia una Nueva Normalidad» , que se alcanzaría a finales de junio. El plan constaba de cuatro fases de desescalada: la fase 0 ó de preparación, la fase 1 ó fase inicial, la fase 2 ó fase intermedia y la fase 3 ó fase avanzada. Cada fase tendría una duración mínima de dos semanas y su aplicación sería gradual, asimétrica, coordinada y adaptable. El ámbito territorial sería la provincia o isla.

Había varios criterios en función de los cuales las autoridades sanitarias decidían si un territorio pasaba o no de fase: las capacidades estratégicas del sistema sanitario, tanto en su vertiente de atención primaria como hospitalaria; la situación epidemiológica en la zona; la implantación de medidas de protección colectiva en comercios, transportes, centros de trabajo y en cualquier espacio público; y los datos de movilidad y económicos.

En Castilla-La Mancha las provincias de Cuenca y Guadalajara avanzaron una semana más rápido que Toledo, Ciudad Real y Albacete.

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Los temporeros se enfrentaron a la policía en plena cuarentena Policía Local

8º El «brote» de los temporeros de Albacete

En mayo, junio y julio los contagios en Castilla-La Mancha no llegaron a 3.000 en total. Entonces cuando surgía algún positivo y también estaba afectado su entorno se hablaba de «brote». El Gobierno metió mucha presión a las comunidades autónomas para que contrataran a rastreadores que tuvieran controlados a los positivos y así lograr que el virus no se volviera a ir de las manos.

Cuando los brotes se multiplicaron, la situación se desbordó e incluso hubo conflictos sociales. En Albacete varios cientos de inmigrantes, que vivían en condiciones lamentables en un asentamiento irregular en la carretera de las Peñas y trabajaban como temporeros, tuvieron que ser confinados por un brote en el que dieron positivo más de 120 .

Los inmigrantes fueron trasladados a la Institución Ferial (IFAB), pero unos cuantos se saltaron la cuarentena y se enfrentaron a la policía, que se vio obligada a cortar la carretera de la zona. «Los chicos están nerviosos porque no tienen información, llevan aquí ya dos semanas, muchos han dado negativo en las pruebas hasta tres veces y no entienden por qué no pueden ir a trabajar», explicó Cheikhou Cisse, portavoz del Colectivo de Apoyo al Inmigrante (Acaim).

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El ocio nocturno lleva cerrado en España desde agosto Rubén Solana

9º Cierre nocturno y perimetral en la segunda ola

Los contagios no dejaron de crecer durante agosto (7.694), septiembre (20.661) y octubre (23.124), pese a las cada vez más restricciones de la Junta de Castilla-La Mancha. En agosto se cerró el ocio nocturno (y así sigue) , y se acordó que las reuniones no podrían exceder de las diez personas. A finales de octubre, tras una reunión de Page con los presidentes de Castilla y León y Madrid, Alfonso Fernández Mañueco e Isabel Díaz Ayuso, se anunció el cierre perimetral de la región (también sigue así) .

En aquellas fechas el Gobierno declaró el estado de alarma (con la intención de que se prolongue hasta el 9 de mayo) e impuso el toque de queda entre las 23:00 y las 06:00 horas, aunque las comunidades autónomas pueden adelantarlo o atrasarlo una hora.

A principios de noviembre el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, dijo en una entrevista: «El confinamiento domiciliario está encima de la mesa, pero también es importante esperar los resultados de las medidas puestas en marcha». Justo en ese momento se alcanzó el pico de la segunda ola (el 2 de noviembre) y los casi 1.000 hospitalizados se redujeron a la mitad antes de las fiestas navideñas.

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En las fiestas navideñas se levantó el cierre perimetral de la región H. Fraile

10º Relajación en Navidad y durísima tercera ola

Aunque los políticos insistieron en que en Navidad había que limitar los contactos sociales, el hecho es que la Junta (y todas las comunidades) hizo lo contrario de lo que pregonó al suavizar parte de las restricciones. El 23 de diciembre se levantó el cierre perimetral de la región para que las familias pudieran juntarse (aunque se recomendaba no hacerlo) y en las noches festivas el toque de queda se extendió más allá de la medianoche.

A la vista de los resultados, fue un error. Pasado el día de Reyes, los hospitales se volvieron a llenar en apenas tres semanas. En Castilla-La Mancha se registraron 50.000 positivos en enero y llegó a haber más de 1.800 hospitalizados , el doble que en el pico de la segunda ola. El 18 de enero Page compareció para anunciar medidas muy estrictas: se cerraba la hostelería, no se podía salir del municipio y se ampliaba el toque de queda. Por fortuna, febrero ha sido un mes en el que se han registrado pocos casos, hay menos de 400 hospitalizados... y los bares vuelven a estar abiertos.

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Portada de ABC con Araceli Hidalgo, de 96 años, la primera persona en ser vacunada en España ABC

11º Araceli, la primera vacunada

Pasadas las nueve de la mañana del domingo 27 de diciembre Araceli Hidalgo, de 96 años, se convirtió en la primera persona en España en ser vacunada contra el coronavirus. La anciana tiene dos hijos, cuatro nietos y un bisnieto, y nació en Guadix (Granada), pero desde hace 25 años está empadronada en Guadalajara. Allí vive en la residencia de mayores «Los Olmos», la elegida por el Gobierno para poner las primeras inyecciones . Después de Araceli se vacunó a Mónica Tapias, auxiliar de enfermería, la sanitaria más joven que trabaja en la residencia.

Araceli dijo a los medios de comunicación que estaba «muy nerviosa» antes del pinchazo, que luego no fue «nada» y solo sintió «un poquito de picor». Tres semanas después Araceli y Mónica recibieron la segunda dosis de la vacuna, con lo que ya están inmunizadas.

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Las cifras oficiales dicen que en Castilla-La Mancha han muerto más de 5.600 personas por coronavirus Guillero Navarro

12º ¿Cuántos casos y fallecidos por covid ha habido en Castilla-La Mancha?

La estadística oficial contabiliza que hasta la fecha se han registrado 5.665 fallecidos por coronavirus (Toledo 2.050, Ciudad Real 1.652, Albacete 862, Guadalajara 576 y Cuenca 525), además de 170.439 casos positivos (Toledo registra 61.796, Ciudad Real 42.494, Albacete 27.607, Guadalajara 20.614 y Cuenca 17.928). Las cifras, tanto de fallecidos como de infectados, se quedan cortas.

Ya a mediados de junio, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha estimaba que más de 5.000 personas habían muerto en la región por covid. Este dato se basaba en las licencias de enterramiento de los registros civiles, que tenían en cuenta tanto los fallecidos por covid como los que habían muerto sin un diagnóstico pero con síntomas compatibles con el covid.

Con los casos ha ocurrido algo parecido. Las cifras que se dieron en la primera ola son irreales. Lo oficial es que en marzo y abril se contagiaron unas 20.000 personas, pero llegó a haber ingresadas más de 3.500 . Mientras, en enero se han contagiado 50.000 y los hospitalizados han sido la mitad.

Por tanto, ¿cuántos fallecidos y casos positivos de coronavirus ha habido en Castilla-La Mancha? No se sabe de manera exacta, pero sí se sabe que son más de 5.665 fallecidos y 170.439 infectados.

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