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Don Juan Carlos cumple 80 años

El afecto y la lealtad salvan el difícil encaje de dos Reyes

Don Juan Carlos admira a su hijo por su honestidad intelectual y Don Felipe reivindica el legado institucional de su padre

Don Felipe y Don Juan Carlos, en el aniversario del ingreso de España en las Comisiones Europeas REUTERS
Almudena Martínez-Fornés

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Don Juan Carlos batirá hoy un nuevo récord. El hombre que restauró la Monarquía tras un paréntesis de 44 años, que trajo la democracia tras casi cuatro décadas de dictadura, que propició la reconciliación de los españoles tras la Guerra Civil, que paró un golpe militar, que impulsó el regreso de España a Europa tras siglos de aislamiento, el primer Monarca español que pisó América , el mandatario que mandó callar a otro en una cumbre, el Jefe del Estado que pidió perdón en público cuando se equivocó y el marino que a los 79 años fue proclamado campeón mundial de vela, se convertirá también en el primer Rey de la historia de España que cumpla 80 años.

El aniversario lo celebrará hoy en privado, con sus familiares, en un almuerzo en el Palacio de La Zarzuela, al que probablemente acuda su hija Doña Cristina , apartada desde hace más de seis años de la actividad institucional, con sus hijos. Tras el encuentro familiar, Don Juan Carlos recibirá mañana el reconocimiento institucional durante la celebración de la Pascua Militar en el Palacio Real, a la que asistirá con Don Felipe, Doña Letizia y Doña Sofía. Será la primera vez que acuda a esta ceremonia castrense desde 2014, cuando todavía era el Jefe del Estado. Y será también la primera vez que coincida con su hijo en público desde hace siete meses.

Con este acto empezará también una nueva etapa para los padres del Rey , que suavizará los tres años y medio de invisibilidad que emprendieron el 18 de junio de 2014, cuando Don Juan Carlos decidió abdicar en su hijo.

Una figura arrolladora

El cumpleaños de Don Juan Carlos ha coincidido con la consolidación del reinado de Don Felipe, de manera que han empezado a perder fuerza las razones que llevaron a los padres del Rey a dar un paso atrás. La razón principal de aquel apartamiento fue ayudar a que los españoles se fueran acostumbrando al nuevo Monarca, después de un largo reinado de casi 39 años, marcado por la personalidad arrolladora de Don Juan Carlos y por unos acontecimientos históricos excepcionales.

Sin embargo, los desafíos políticos que ha tenido que afrontar Don Felipe en los primeros años de su reinado, como fueron la crisis de gobernabilidad de 2016 y el golpe separatista de 2017, no solo han ayudado a consolidar en muy poco tiempo la figura del nuevo Rey sino que también le han dado la oportunidad de dar a conocer a la opinión pública su solidez como Jefe del Estado .

Tras el relevo en la Corona, Don Felipe también se vio obligado a marcar diferencias con el reinado de su padre y a adoptar una serie de medidas internas con el fin de devolver a la Corona la popularidad de la que gozó durante más de tres décadas y que había perdido en parte en los últimos años. No obstante, a medida que pasa el tiempo, el peso de los logros institucionales de Don Juan Carlos están haciendo olvidar los errores personales de su última etapa: su caída en Botsuana, su relación con una ambiciosa mujer llamada Corinna o su dificultad para marcar distancias con su hija la Infanta Doña Cristina tras el caso Nóos.

Una nueva oportunidad

A todo esto se añadía un hecho que la opinión pública nunca comprendió: la ausencia de Don Juan Carlos en un acto tan destacado como fue el 40 aniversario de las primeras elecciones de la democracia, y el malestar manifestado ese día por el propio padre del Rey por no haber asistido a la ceremonia celebrada en el Congreso. Zarzuela atribuyó dicha ausencia a un problema protocolario, y este año tendrá la oportunidad de compensar esa exclusión buscando una fórmula para que los dos Reyes -padre e hijo- puedan asistir al gran aniversario de 2018 : los 40 años de la Constitución.

Lo cierto es que la coexistencia de dos Reyes conlleva algunas dificultades institucionales que, en este caso, el afecto personal y la lealtad entre padre e hijo han podido solventar. En algunas Monarquías extranjeras, como la de los Países Bajos, cuando un Rey abdica se le retira este título y recibe el de Príncipe para evitar confusiones y reforzar la imagen del relevo. Pero en España no existe esa tradición, y difícilmente la habría asumido la opinión pública.

Por ello, días antes del relevo en la Corona, se modificó el Real Decreto de títulos y honores para reconocer a Don Juan Carlos y a Doña Sofía como Reyes durante toda su vida . De esta forma, se quiso «plasmar la gratitud por décadas de servicio a España y a los españoles». A partir de ese momento, habría cuatro Reyes en España y se irían resolviendo sobre la marcha las dificultades que pudieran surgir.

Don Juan Carlos también vivió momentos difíciles con su padre , el Conde de Barcelona, hace cincuenta años, cuando las circunstancias históricas le llevaron a saltarse un eslabón de la cadena dinástica para restaurar la Monarquía tras el franquismo. Al final, el afecto entre padre e hijo y el sentido dinástico se impusieron a las tensiones familiares que aquel hecho provocó, y Don Juan Carlos procuró reconocer y compensar a Don Juan , en la vida y en la muerte, por su enorme sacrificio personal.

Igual que entonces, el afecto personal y la lealtad se han impuesto en las relaciones entre Don Juan Carlos y Don Felipe. Durante la larga y complicada espera que precedió al relevo en la Corona, Don Felipe jamás dio muestras de impaciencia , a pesar de que el tiempo y los errores personales de Don Juan Carlos en aquella época jugaban en su contra. Y eso, su padre siempre se lo ha reconocido: «Como hombre es de una gran honestidad intelectual, muy preparado, muy trabajador y muy leal, muy leal sobre todo a mí », afirmaba entonces.

Después del relevo, Don Juan Carlos ha hablado en términos muy elogiosos de Don Felipe: «Tenemos un gran Rey» , dice al que le pregunte sobre su hijo e insiste en que está a su disposición para lo que pueda ayudar. Además, ha procurado dejarle al margen del único conflicto que ha trascendido en los últimos tres años y medio: su famosa ausencia en el 40 aniversario de las primeras elecciones. Pero, incluso aquel 28 de junio, Don Felipe le rindió en ausencia un testimonio de «gratitud, homenaje y admiración».

Después de siete meses

Hasta ese momento, Don Juan Carlos había acompañado a Don Felipe a cinco actos institucionales en los últimos seis meses. Uno de ellos se celebró en Marín (Pontevedra) el 2 de junio, y el Rey aprovechó esa ceremonia para recordar que coincidía «con el tercer aniversario del día que anunciaste tu decisión de abdicar la Corona tras 39 años de servicio a España como su titular». «Gracias, Majestad» , agregó. La última vez que Don Juan Carlos acompañó al Rey en un acto fue el 12 de junio, cuando asistieron a la presentación del Informe Cotec. Siete meses después, padre e hijo volverán a coincidir mañana en público en el Palacio Real. Será el primero de los reconocimientos que Don Juan Carlos reciba con motivo de su cumpleaños.

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