Hazte premium Hazte premium

Sánchez mantiene en vilo a un PSOE más dividido que nunca

Los socialistas rehuyen el «abrazo del oso» del PP porque son «primer partido de la oposición»

Frío saludo de Pedro Sánchez a su exportavoz Antonio Hernando, ayer en el Congreso Jaime García
Gabriel Sanz

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Pedro Sánchez tiene a los suyos en un ¡ay! Anoche dio a entender que hoy no va a entregar el acta, como se especuló durante todo el día. «Lo veréis el sábado» , dijo a los periodistas a la salida del Pleno, dando a entender que mañana acudirá a la segunda votación .

Aun así, todo son dudas en el PSOE. Unos apuestan porque romperá la disciplina y votará «no» a Mariano Rajoy y entregará el acta a continuación, porque «más vale morir de pie que vivir de rodillas (sic)» ; y otros, los menos, que votará «no» y se quedará como diputado a liderar la oposición a Susana Díaz y Javier Fernández . Una posibilidad remota porque eso le inhabilitaría para disputar a la andaluza la secretaría general del partido.

En realidad, nadie sabe a ciencia cierta qué hará su silente exsecretario general; solo que mañana votará y que el domingo se explicará ante Jordi Évole en «Salvados» . Pero la inflamación en los suyos es tal que todos tienen claro que no va a dejarles «tirados» -votarán «no» ya seguro Susana Sumelzo, Margarita Robles, Zaida Cantera, Odón Elorza o Pere Joan Pons , y los siete del PSC- «porque eso es lo que querrían», dicen los ayer oficialistas y hoy críticos refiriéndose a la gestora.

Así que, en medio de este clímax emocional disparado, con el exlíder de cuerpo presente o vivo y coleando -depende de con quien se hable-, y sus «viudos» y «viudas» en el patio del Congreso de corrillo en corrillo con periodistas, Antonio Hernando tenía ayer muy difícil sacar nota .

Para los más favorables aprobó porque es un parlamentario experimentado, frío, ideal para el difícil «papelón» que tenía ayer -esto es lo único en lo que parecieron de acuerdo los dos sectores en que está dramáticamente dividido ese partido-. Y cumplió su papel.

Aplausos y «brazos caídos»

El portavoz del Grupo Socialista levantó por momentos algunos tímidos aplausos entre los abstencionistas convencidos y los resignados, rápidamente acallados por la «sonora» estampa de brazos caídos de los sanchistas irredentos , que ni siquiera se levantaron al final para hacer clac.

Algo que le valió a Sumelzo la bronca de la diputada sevillana Carmen Cuello. Antonio Hernando intentó convencer a todos de que el PSOE va a seguir siendo «el primer partido de la oposición», pero si no le creyeron ni los suyos... ¿cómo van a hacerlo los demás?

«Esquizofrénico» , «patético» o «lamentable», corrieron a decir los todavía seguidores de quien hasta hace un mes era el jefe de todos ellos. Tampoco se lo puso fácil el «abrazo del oso» que le dio Rajoy, como afeó el propio portavoz socialista, diciendo que PP y PSOE son más parecidos de lo que los socialistas quisieran.

Hernando le replicó que la abstención del PSOE será solo a su investidura, no a toda la legislatura, y le pidió que lo vaya asumiendo. «Vamos a seguir siendo su oposición, compréndalo », le espetó el portavoz socialista, al tiempo que advertía a Rajoy de que si quiere diálogo «tiene que rectificar», y que no sea tan «triunfalista» cuando habla de España y los españoles, en referencia a los datos económicos que dio el presidente en funciones. Aunque se alegró del empleo creado y de que se haya dado un «pequeño paso» con el efecto de las reválidas.

Hernando le recordó que ha mandado un plan presupuestario a Bruselas en el que se dibuja un recorte de 5.500 millones de euros, producto «de la juerga de los últimos presupuestos para la campaña electoral y de la reducción de impuestos a las rentas más altas». En este punto, Hernando advirtió al candidato de que no cuente con el PSOE para que el recorte se produzca en las espaldas de los que más han sufrido la crisis, sino que tendrá que venir por la vía de los ingresos. Y tampoco podrá contar con el Grupo Socialista, recalcó, para conseguir la competitividad de la economía vía bajada de salarios, ni para recortar protección social.

El presidente de la gestora, Javier Fernández, sacó pecho de que las reválidas educativas han caído porque el PSOE va a permitir que haya gobierno y se felicitó de que el presidente en funciones haya ofrecido en el debate de investidura «un diálogo en relación a la estructura de país y al problema concreto de Cataluña». Y aprovechó para asegurar que «no está en mi cabeza expulsar a nadie», en alusión a la quincena de diputados socialistas que planean romper la disciplina de voto.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación