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El «ruido» del PSOE torpedea a Sánchez

El portazo de Luz Rodríguez empaña el fichaje de Margarita Robles y causa malestar interno y rechazo sindical

Margarita Robles, Pedro Sánchez y la líder del PSM, Sara Hernández, ayer en Madrid Borja Puig de la Bellacasa

GABRIEL SANZ

No hay tregua para Pedro Sánchez . Ayer, media hora antes de que las radios anunciaran a las ocho de la mañana el fichaje de la magistrada del Tribunal Supremo Margarita Robles como número dos en la candidatura del PSOE al Congreso por Madrid, otra exsecretaria de Estado, Mariluz Rodríguez , le daba un sonoro portazo vía Twitter. «He decidido volver a mis tareas como profesora titular de la universidad de Castilla-La Mancha, por lo que he comunicado a Pedro Sánchez mi deseo de no ir en las listas », escribía lacónica.

Rodríguez llevaba días esperando una llamada telefónica del secretario general, al menos para ir cuatro, el puesto que había dejado vacante Irene Lozano . Y como esa llamada no llegó, la todavía secretaria de Empleo de la Ejecutiva se desahogó en la red. Inmediatamente, los sindicatos lamentaron su marcha.

«Ha sido una sorpresa, aparte de ser una persona muy conocida es amiga. Es una pena que una persona de su capacidad no vaya a estar en el próximo parlamento », reconoció el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo . El de UGT, Pepe Álvarez , se quejó que una persona de su «prestigio» no tenga hueco en las listas del PSOE, pero añadió que el partido es el que «hace y deshace».

Luz Rodríguez, vehemente, una de las abanderadas de la derogación de la reforma laboral del PP, se ha batido el cobre por Sánchez en estos dos años. Y a pesar del «malestar» en muchos sectores del PSOE por su marcha, casi todo el mundo optó por el silencio dado el delicado momento que atraviesa la formación socialista, asediada por Podemos-IU.

No obstante, el secretario general de Juventudes Socialistas, Nino Torre, decidió hablar. Muy distanciado de Sánchez, Torre, afín al barón asturiano Javier Fernández , escribió en la red: «Gracias por tu trabajo y amistad. Me da mucha rabia perder a una excelente persona y a un referente para defender los derechos laborales» .

Sánchez aprovechó las primeras horas para grabar en la terraza de un hotel madrileño y subir a Facebook un vídeo de factura casera, una especie de «Periscope» en el que se le puede ver junto a la secretaria del PSM, Sara Hernández, dando la bienvenida a Robles.

«El cambio es imprescindible»

Al estilo de las últimas «producciones» de Podemos, ora Pablo Iglesias y Alberto Garzón abrazándose en Sol ora compartiendo ambos una cerveza, Sánchez explica a cámara que Robles es «una comprometida con el progreso, con la justicia social y con la igualdad» .

«Una mujer independiente, progresista, feminista» , señala Sánchez en una presentación que sorprende a muchos en el PSOE porque, aún planeada, transmite «improvisación». «Es como si lo hubieran planificado para borrar el tema de Luz» .

Robles, ex secretaria de Estado de Interior con Felipe González , señala que vuelve a la primera linea porque «es imprescindible que haya un cambio en este país» y Pedro Sánchez «representa» ese cambio». Lo cierto es que, a pesar de las caras sonrientes de los tres, en el partido, tanto en la Dirección Federal como entre los críticos, empieza a haber seria preocupación por la deriva negativa en la que parece instalado el PSOE.

Sánchez es consciente de ello e intenta retomar la iniciativa, desde una posición de autoridad muy mermada también por las continuas referencias a la debilidad de su liderazgo. Su estrategia incluye tanto el fichaje de Robles como el veto al acuerdo para una lista conjunta con Podemos al Senado por la comunidad Valenciana.

Ferraz estudia cómo hacer frente al desafío que supone la alianza Podemos-IU. No es que el equipo del líder socialista crea que pueda a producirse un adelantamiento en las elecciones del 26 de junio, pero sí una tendencia al «empate» , que complicaría la gestión del resultado.

No es casualidad en este sentido, que Patxi López volviera ayer a «avergonzarse» de episodios como el de Guillermo Fernández Vara reabriendo la polémica sobre el liderazgo de Sánchez -es «dramático» lo que pasa- y diera un aldabonazo frente a la postura del presidente valenciano, Ximo Puig , que quiere un acuerdo con Iglesias. Sánchez intenta remontar con la presentación este domingo del «gobierno del cambio», para el cual ha rescatado a Josep Borrell , entre otras personalidades.

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