División en la CUP tras el «no» a Mas
Asambleas municipales y miembros destacados del partido lamentan que la organización finalmente no favorezca la investidura del candidato de Junts Pel Sí
El portazo definitivo de la CUP al presidente en funciones de la Generalitat, Artur Mas, ha dejado también secuelas dentro del partido radical. La asamblea local del partido en Arenys de Mar (Barcelona) o el concejal en Girona Lluc Salellas han lamentado esta tarde la decisión tomada por el Consejo Político de la formación celebrado de no investir a Artur Mas como nuevo presidente de la Generalitat. En un comunicado, la asamblea de Arenys de Mar, que forma parte de la del Maresme, señala que esta decisión «no representa la voluntad de la militancia» y recuerda que la posición mayoritaria «era favorable al proceso, un 82% en la comarca y un 100% en la villa». «Lamentamos que al final se haya tomado esta decisión y que el quién haya pasado por encima de lo más importante, la construcción de la 'república catalana'», destacan.
Por su parte, el concejal de la CUP en Girona Lluc Salellas, en su cuenta de twitter, indica que hoy se siente triste, «todo es decepcionante» y agrega que desde Gerona «hemos trabajado internamente por otro escenario. No lo hemos conseguido. Debemos asumir la responsabilidad», concluye.
A primera hora de la tarde, tras conocer la decisión final sobre la investidura de Mas, algunas voces incluso apuntaban a que el líder del partido en el Parlament, Antonio Baños, podría presentar su dimisión al mostrar su disconformidad con la decisión tomada. Sin embargo, los portavoces que comparecieron ante los medios descartaron dicha posibilidad. En concreto, la diputada Gabriela Serra ha negado que Baños este pensando en dejar sus cargos y ha defendido los altos niveles de satisfacción que ha generado la decisión: «Todos necesitamos nuestros momentos para rehacernos», ha apuntado. Baños, que durante la campaña electoral había asegura que «nunca, nunca, nunca» apoyarían la investidura de Mas como presidente de la Generalitat, en las últimas semanas había dejado mostrar ínternamente su preferencia a favor del «sí» para que el denominado «procés» no cayera en punto muerto.
Las organizaciones civiles soberanistas también mostraron su disgusto con la negativa del partido de extrema izquierda a facilitar la continuidad de Mas en la Generalitat: En Twitter, el presidente de la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC ) Jordi Sánchez pidió perdón a los que «se sienten engañados» después del portazo a la investidura de Artur Mas y lamentó que la ANC pidiera el voto para todos los partidos independentistas.
Para Sánchez, ahora «toca rehacer la voluntad del pueblo , en la certidumbre de que todo lo que hemos hecho los últimos años no se pierde y construir un nuevo proyecto de unidad».
Oposición: Artur Más, culpable
Desde la oposición, llovieron las críticas contra Artur Mas por la situación de parálisis en que se halla Cataluña y la probable convocatoria de los cuartos comicios en seis años: En su cuenta de Twitter, el líder de Ciudadanos Albert Rivera , confiço en que Cataluña pueda acabar con «la corrupción, los recortes y la división» tras la decisión de la CUP.
En esta línea se pronunció la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy , quien calificó el retorno a las urnas como «el mar menor» aunque se ha pedido que estos «no se interpreten como una segunda vuelta del plebiscito independentista», sino como «una oportunidad para pasar página a la inestabilidad política».
Además, apuntó a Europa Press que el PP se volverá a presentar a las elecciones con Xavier García Albiol «como una alternativa al independentismo» y «a un posible acuerdo entre la izquierda radical» que formarían «Podemos con el partido socialista en Catalunya». Para la dirigente popular lo importante es que se «abra una nueva etapa de estabilidad y recuperación» y ha pedido aprender que «dar la mano a radicalismos solo lleva a la inestabilidad política».
Por su parte, la portavoz de los socialistas catalanes Esther Niubó mostró el respeto del PSC por los procedimientos asamblearios de la CUP y ha cargado toda la responsabilidad sobre el presidente en funciones de la Generalitat: «La parálisis del Govern y de los tres meses que se han perdido desde las elecciones de septiembre no es la CUP, es el president Artur Mas», informa EFE.
A juicio de la dirigente socialista, si desde septiembre « se ha dicho que todo el país estaba en manos de la CUP es sólo por la responsabilidad de Mas» y agregó, que «lo que mal empieza con una declaración de desconexión, sólo para satisfacer a la CUP, mal acaba» y ha apuntado que ahora «se comprobará si lo que estaba en cuestión era la independencia o si el gran tema era Mas, que podría dar un paso a un lado para priorizar el proceso » soberanista».
Referéndum y mayoría progresista
El líder de CatSíQueEsPot Lluís Rabell declaró a EFE que «la responsabilidad del bloqueo que sufre Cataluña es fundamentalmente de quien ganó las elecciones y de Artur Mas». Además sobre la CUP constató que el proceso deliberativo de esta formación ha acabado con que esta formación «manteniendo su palabra de no investir a Artur Mas, po lo que saludamos esta coherencia».
Respecto a la posibilidad de que haya elecciones anticipadas en marzo, Rabell afirmó que «es un escenario que no nos da miedo , especialmente tras los resultados de En Comú Podem del pasado mes de diciembre en Cataluña» , en alusión a su victoria en Cataluña en las elecciones generales. Además, consideró que «en los próximos meses debería trabajarse para conseguir una amplia mayoría social de progreso que recupere la mayoría en favor del derecho a decidir , con la perspectiva de un referéndum, que ahora cuenta con aliados en España».
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