Banco Central, Hacienda y Educación propias, entre los ejes del nuevo «Estado catalán»

En la reunión mantenida el 6 de julio de 2015 se dejó constancia de la necesidad de contar con un Banco Central propio, si bien Josep Maria Jové advierte de que esa estructura «debe estar pactada, pero sin publicidad por prudencia» y también por estrategia. «Todo lo que no se puede publicar –añade el exnúmero 2 de Oriol Junqueras, arquitecto del «procés»– hay que ir haciéndolo hasta el momento de la desconexión pero cuando la hagamos ha de estar preparado». De la misma forma, Jové cree que hay que diseñar una estructura de seguridad en las mismas condiciones. Es decir, sin dar cuenta de ello a la opinión pública para evitar problemas. El 8 de noviembre de 2016 advierte en este sentido que «los Mossos harán siempre lo que digan los jueces. No habrá ninguna orden del Departamento de Interior. ¿Podemos pactar las reacciones? Coordinar respuesta para ser eficaces en la gestión de la protesta ». Anna Gabriel, de la CUP, presente en la cita advierte de que «no renunciaremos a la estrategia de desobediencia. Pide que les avisen que los detendrán. Que algún mando avise a cargo político y que estén informados».

La Educación era clave para los independentistas y su control decisivo para evitar problemas en el futuro. El 24 de abril de 2016 se hace un esbozo de cómo debía ser el modelo y se fija una estrategiaconsistente en no crear nuevas plazas de funcionarios en los próximos 6 u 8 años, periodo en el que estaba prevista la jubilación de un 30 por ciento de la plantilla. Para los secesionistas era imprescindible analizar el sistema alternativo a implantar partiendo de la base de que consideraban el sistema actual como paralizado debido al Departamento y a la fuerza de los sindicatos. Por ello plantearon la necesidad de reconvertir el sistema planteando la contratación laboral con garantías de personal no funcionario. Podría inferirse que querían congelar plazas públicas de funcionariado .

En el desarrollo de la Hacienda propia con la que soñaban los independentistas se preveían dos fases: la vía autonómica y la que se abría una vez alcanzada la independencia. Eso fue así hasta el punto de que en el desarrollo normativo, según el cuadero de Josep Maria Jove, se recogían cuatro leyes, la primera y segunda pensadas para la vía autonómica, y la tercera y la cuarta que ya no tenían encaje alguno dentro de la Constitución.

Estas dos últimas debían desarrollar las Aduanas, el Catastro, el Ente Gestor Integral de Tributos, el régimen fiscal general y la regulación específica de tributos que actualmente son, en exclusiva, competencia del Estado. T Systems sería la empresa responsable de desarrollar parte del sistema a partir, parece inferirse, de la Hacienda Andorrana y a través de una «joint venture» con Everis, según el informe sobre el «dietario del procés» elaborado por la Unidad de Policía Judicial de Cataluña al que ha tenido acceso ABC. Era necesario trabajar con una plataforma SAP y dar cobertura legislativa. El objetivo era disponer de una base de datos final a partir de 162 fuentes de información: actividad, censos bienes inmuebles, vehículos y entidades financieras.

El paraíso de una Cataluña independiente no era tal. Los propios secesionistas admitieron en una reunión celebrada el 5 de abril de 2016 que no se podían hacer grandes cambios respecto al sistema español de Seguridad Social y mostraban su preocupación por cómo garatizar el futuro de las pensiones. Por supuesto, nada de esto admitieron públicamente a lo largo de estos años. Para la creación de una Seguridad Social propia los nacionalistas consideraban que lo primero era disponer del ente y que luego ya se vería cómo se gestionaba. Para ese proyecto se fijó una ponencia conjunta con el objetivo de garantizar la protección social integral catalana que giraría en torno a la ley social de la desconexión. Las anotaciones de Jové revelan que se habían estudiado varias propuestas, en las que por cierto no se tenía en cuenta un posible escenario en 2018, y se precisa que Convergencia pedía más presión fiscal global.

Grandes fortunas. «El govern en un periodo de 3 meses presentará un proyecto de ley de creación de un impuesto sobre la riqueza».

-Impuesto nuclear. «Cambia hecho imponible y parece que CGE (Consejo Garantías Estatutarias) no lo tumbará (el TC ya lo veremos...) 60MM».

-Bebidas azucaradas. «10 céntimos/litro. 30-40M euros. Agosto/septiembre. Escándolo Coke que hace que muchos estados la están aplicando».

-Viviendas vacías. «Mínimo exento de menos de 350metros cuadrados (50% contribuyentes que reportarán 1%)»

-Cruceros. «Pernoctaciones inferiores a 12 horas las gravamos al 0,65».

-Estancias turísticas. «Había acuerdo con empresas para cambiar tarifas pero ahora parece que no».