Hazte premium Hazte premium

Opinión - Todo Irá bien

Lo peor ha sido la gente

El PP ha hecho bien renovándose, pero el auténtico atraso es la izquierda, y el socialismo es el cáncer

Lo peor ha sido la gente Efe

Por Salvador Sostres

La recuperación económica va notándose en sus efectos y cada vez más españoles se benefician de ella. Ya no hay tanta sed de solución mágica. Aunque todavía asustado, el bipartidismo que muchos daban por liquidado vuelve renovado, como único escenario plausible.

El PP ha aprendido la lección, se ha puesto al día, la transparencia ha llegado a sus estructuras y se ha demostrado capaz de hacer frente a las situaciones más dramáticas, tal como en su día lo hizo, brillantemente, Felipe González , el presidente más liberal que ha tenido España. No hay política más vieja que la que no resuelve los problemas y Podemos naufraga con su retórica venezolana y Ciudadanos está colapsando de narcisismo en sus divanes ultrapuros.

Está bien que la ciudadanía mande sus mensajes, pero tendría que aprender también de sus excesos. Porque por graves que hayan sido los defectos y las debilidades de los partidos tradicionales, nada ha sido tan lamentable durante este tiempo como la sensación de vivir en un país entregado a toda clase de charlatanes. Nada ha sido tan deprimente como esta masa vulgar, preintelectual y afeminada, entusiasmada con vendedores de pócimas milagreras. La nota más baja de la crisis la ha dado el grueso de la tropa quejica y victimista, sin consideración alguna con los que con nuestro esfuerzo y nuestro sacrificio les continuábamos pagando la sanidad y la escuela de sus hijos, acribillados por una fiscalidad impagable, y teniendo que soportar que encima nos insultaran.

Hay que tener las categorías claras. El PP ha hecho bien renovándose, pero el auténtico atraso es la izquierda, y el socialismo es el cáncer. Es dulce que los políticos escuchen a la gente, pero la gente tiene que saber hacerse digna de su condición ciudadana, y un poco más de contención, de prudencia y de virilidad no sólo sería lo deseable sino que es lo exigible. Hay que estar a la altura del enorme privilegio de ser un ciudadano español del siglo XXI, con los derechos y los deberes que conlleva. A los que de tanta dignidad presumen es justo que vayamos a reclamársela.

El populismo retrocede porque la gente vuelve a tener dinero. Bien está. Pero también cuando no nos compran la muñeca tendríamos que comportarnos como ciudadanos y no este humillante desparramarnos mitad peronista, mitad venezolano, totalmente indigno de una democracia culta y civilizada.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación