Pablo Iglesias llama «inútil» al Gobierno de Rajoy y lo reta a un debate televisivo

Convencido por las encuestas de que su voz debe ser escuchada, aunque no tenga representación parlamentaria , Iglesias ha convocado este miércoles a sus seguidores y a la prensa en el Círculo de Bellas Artes para asistir a lo que él mismo ha llamado «el otro estado de la Nación». La cita parecía inspirada en las ruedas de prensa paralelas que convocaba Chávez para intentar reventar las Cumbres de Jefes de Estado en las que se sentía tan incómodo.

Iglesias ha sido recibido al grito de «Pablo, presidente» por las 500 personas que han llenado el teatro elegido y, a partir de ese momento, ha empezado en el escenario una extraña representación en la que el nuevo político ha leído su discurso dirigiéndose a un presidente del Gobierno ausente, también como hacia Chávez cuando dejaba una silla vacía para que se sentara Bolívar.

Antes de que Iglesias haya pronunciado palabra alguna, se ha emitido en una pantalla gigante un vídeo con un fragmento de la intervención del presidente del Gobierno en el Debate del estado de la Nación . Al Rajoy del video le ha caído un chorreo de silbidos, abucheos, «fueras», gritos de «mentiroso» y algún insulto subido de tono por parte del público. Y, justo cuando ha terminado el vídeo, Iglesias ha tomado la palabra, haciendo la ficción de que era su turno en el debate. «Hacía falta que el principal partido de la oposición respondiera al Gobierno y, por eso, estamos aquí», ha explicado y ha empezado su discurso: «Señor Mariano Rajoy, usted y yo sabemos que estamos viviendo una situación excepcional», ha relatado. Toda su intervención ha estado dirigida al ausente «señor presidente».

Con ese formato, Iglesias ha retado a Rajoy a mantener un debate televisivo con él, «cuando quiera y donde quiera», y ha defendido su proyecto político frente al «Gobierno inútil» de Rajoy. Un proyecto que, entre otras medidas, pasa por cambiar las leyes, «porque están pensadas para que los ricos puedan robar» . Y es que el discurso se ha centrado mucho en «los ricos». Ha empezado diciendo que «sabemos que necesitamos a los ricos, pero les vamos a pedir responsabilidad» y ha acabado advirtiendo de que «cuando gobernemos, vamos a investigar a las grandes fortunas».