El PP de Guipúzcoa quiere elegir a sus candidatos por «primarias»

Una de las reclamaciones que con más énfasis ha hecho Quiroga desde que llegó a la dirección del PP ha sido la de readecuar el discurso político a las necesidades de la sociedad. Con la economía, el empleo y el apoyo a los emprendedores en primer término de la agenda popular y dejando atrás la mera disputa ideológica y partidista.

«Hay que pasar de la resistencia a ser un actor influyente y más presente en la sociedad vasca (...) Para eso planteo un cambio de actitudes interno», fue el mensaje de Quiroga que ha levantado ampollas en Guipúzcoa, pero que tampoco ha gustado demasiado en Álava, aunque se mantengan al margen de esta polémica. El alcalde de Vitoria, Javier Maroto, y el diputado general, Javier de Andrés, intentarán seguro mantener el poder.

«No es justo. Precisamente aquí empezamos la modernización del PP con Antonio (Basagoiti). Somos el ejemplo de renovación. No se nos puede acusar de lo contrario», lamenta un alto dirigente provincial. «Desde 2011, con Bildu gobernando las instituciones, abandonamos el monotema -ETA y sus presos- y nos pusimos a hacer política de verdad, pactando con todos, siendo útiles», afirma otro portavoz. «Es que no se explica. Es un descrédito público desde dentro. No se ha visto nunca algo parecido. El cabreo es generalizado», abundan las voces consultadas.

Fuentes de la dirección del PP vasco apuntan a que antes del 23 de enero se conocerán las listas definitivas ya que la intención de Quiroga es acudir a la Convención Nacional del partido en Madrid, ese fin de semana, con «los deberes hechos». «No va a haber ningún problema», auguran. Pero lo cierto es que buena parte de las bases guipuzcoanas están sublevadas desde que trascendió que Quiroga pretende reforzar las planchas del partido con otros candidatos con más empuje, tanto en Guipúzcoa como en Vizcaya. El partido afronta un último mes turbulento para cerrar sus listas. De momento, lo único que está claro es que el grupo popular tiene que buscar un recambio en el Ayuntamiento de Bilbao, después de que la dirección de Quiroga lograra desplazar a su anterior portavoz, Cristina Ruiz, al Parlamento vasco. Esa ha sido de momento la gran jugada renovadora que persigue la presidenta después de sustituir a Iñaki Oyarzábal por Nerea Llanos en la secretaría general.

Pero ahora Quiroga lo tiene más difícil ya que ya no se trata de configurar su equipo de la dirección regional, como en el caso de Llanos, sino de confeccionar las listas electorales. «Y la propuesta sale de los comités provinciales», recuerdan las voces discrepantes, también desde Vizcaya.

En este complicado escenario, ha cobrado fuerza la idea de abrir un proceso más participativo para que sean las bases las que elijan a sus candidatos. A priori, el grupo de los cargos y afiliados respaldan las candidaturas de Ramón Gómez Ugalde a la alcaldía de San Sebastián y Juan Carlos Cano a la Diputación foral. «Lo que está claro es que no se aceptan dedazos. Ni de Génova, ni del partido regional ni de nadie», asegura un veterano del PP vasco, quien ve «perfectamente posible» plantear una «especie de primarias» que, por ejemplo, permita la recogida de avales hasta una fecha concreta para presentarse. «En otras organizaciones del PP se han hecho ya procesos abiertos», apunta.

Otros destacados dirigentes no lo creen así y la dirección de Quiroga no baraja hoy esa opción. En todo caso, Génova ha rechazado esta idea para centros neurálgicos como Madrid, ante la insistencia de líderes como Esperanza Aguirre. «Los Estatutos del PP no recogen la opción de primarias o listas abiertas», dicen, pero portavoces como Floriano se han mostrado partidarios a abrir el debate a futuro.

Esta apuesta de ampliar la participación a las bases no es nueva en el PP vasco. Quiroga ya fue elegida en un congreso regional asambleario al sustituir a Basagoiti el pasado mes de marzo . Y Borja Sémper la ha defendido siempre. De hecho, después del verano comentó su idea de organizar un proceso abierto para que el portavoz en San Sebastián, Ramón Gómez, saliera reforzado antes de elecciones tras una legislatura «a la gresca» con el resto del grupo municipal.

Es justamente Sémper, como presidente del PP Guipuzcoa, quien tiene la clave, según reconocen casi todos en el partido. Tiene dos opciones: o llega a un acuerdo con Quiroga para buscar cabezas alternativas o se planta en su posición actual de mantener a Gómez y Cano. Sus compañeros le piden que actúe «cuanto antes» y «proponga al comité electoral a los candidatos» que él considere habiendo peinado primero las voluntades dentro de las bases. «Si Arantza quiere dar imagen de apertura lo que debe hacer es abrir la decisión a la mayoría», insisten los críticos.