Cargos del PP piden una gestora en Madrid y sustituir a Esperanza Aguirre

Los casos de corrupción que están afectando al Partido Popular de Madrid ha llevado a algunos dirigentes y cargos de esta formación regional a pedir que se disuelva la actual dirección, encabezada por Esperanza Aguirre, y se nombre una gestora, según las fuentes consultadas por ABC.

La situación interna empieza a ser crítica, sobre todo después de que Aguirre se haya desentendido de la responsabilidad de nombrar a los alcaldes implicados. Las críticas arrecian sobre Aguirre: «En Madrid no se ha nombrado ni un solo alcalde sin que ella haya dado el visto bueno, y lo que tiene que hacer es asumir sus responsabilidades. Es indignante escucharla decir que ahora no conoce a nadie. Todos conocían lo de Granados y lo extraño es que no haya salido antes».

Los movimientos para el nombramiento de esa gestora están empezando a realizarse, ya que miembros del Comité Ejecutivo regional aseguran que «el problema es que el partido está en descomposición. No hay una dirección política y los comités locales no saben a quién recurrir sobre quién tiene que ser o no candidato para sustituir a los alcaldes dimitidos. El Partido Popular en Madrid parece el ejército de Pancho Villa».

Este miembro de la dirección regional insta a « Rajoy a tomar una determinación. Veo absolutamente necesario montar una gestora y enderezar esto porque no se puede aguantar este goteo incesante. O bien que sea la propia Aguirre la que decida irse y dejar paso a otros o que el partido tome medidas». El malestar se extiende por toda la organización en Madrid, diputados nacionales sostienen que lo que tiene que hacer de forma inmediata es convocar un Comité Ejecutivo Regional Extraordinario y «explicarse y asumir responsabilidades».

Pero estos dirigentes dudan de que lo vaya a hacer. En este sentido, aseguran que «en el último Comité Ejecutivo que se celebró hace una semana no se habló ni una palabra del escándalo del uso de las tarjetas de Bankia».

La preocupación no solo afecta a los populares madrileños sino que en el conjunto de la organización las críticas también arrecian. En el Congreso los corrillos de diputados nacionales no dejaban pasar ayer la oportunidad de cuestionar la actuación de Aguirre. Algunos recordaban como Mariano Rajoy no quiso incorporar a Francisco Granados al Comité Ejecutivo que surgió del Congreso Nacional de Sevilla de febrero de 2011, «a pesar de que se lo pidieron».

Desde la dirección nacional se han acogido con satisfacción las palabras pronunciadas por el presidente del Gobierno el pasado martes en el Senado. El vicesecretario de Organización del PP, Carlos Floriano, aseguró ayer en los pasillos del Congreso que Mariano Rajoy estuvo «bien». El dirigente nacional señaló que ya «se han hecho cosas» contra la corrupción, pero que en el futuro «se harán muchas más».