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Juan Feliu sobre Magaluf: «Es mentira que el Ayuntamiento no haga nada»

El portavoz del Consistorio de Calvia, del que forma parte Magaluf, responde a las quejas de los vecinos del municipio

Juan Feliu sobre Magaluf: «Es mentira que el Ayuntamiento no haga nada» joan llado

daniel ramírez

La calle Punta Ballena de Magaluf engulle noche tras noche a miles de jóvenes que salen a pasárselo bien. El exceso está presente entre muchos de los británicos que frecuentan estos cuatrocientos metros durante la temporada de verano. Este núcleo, que forma parte del Ayuntamiento de Calviá, ocupó las portadas de muchos periódicos y dibujo los documentales de varias cadenas británicas después de que se distribuyera en las redes sociales el vídeo del “mamading” , donde una joven hacía felaciones a los asistentes a una discoteca a cambio de alcohol. Más de 1.600 vecinos han firmado una petición de change.org para exigir al Ayuntamiento que «pare la degradación» de Magaluf. ABC ha recogido las quejas de estos vecinos y las traslada en esta entrevista al portavoz del Consistorio, Juan Feliú.

En temporada de verano, Magaluf ocupa con frecuencia las portadas de los periódicos. ¿Qué es Magaluf?

Es complicado situarse desde la lejanía. Magaluf es uno de los cerca de quince núcleos que forman el municipio de Calvia. Tiene una calle que se llama Punta Ballena, de 400 metros, lo que supone un 5% de la superficie de Magaluf. Allí se ubica el 90% de la fiesta del núcleo. Las situaciones que pueden verse allí no tienen nada que ver con lo que ocurre en el resto de sitios. Está frecuentada, básicamente, por británicos. Allí se juntan cada noche cerca de 6.000 personas. La gente ingiere alcohol, se va de marcha, y ocurren una serie de hechos que son más difíciles de comprobar de lo que puede parecer.

Más de 1.700 vecinos dicen que la situación es «insostenible». Aseguran que «el Ayuntamiento no hace nada».

Eso no es cierto. Este equipo de gobierno está poniendo medios. Hay una serie de departamentos que focalizan la mayoría de sus recursos en esta problemática. Hemos realizado más de 500 actas referidas a la inspección de locales. Hemos cerrado cuatro o cinco bares, alguno de ellos en Punta Ballena. Además, la Policía Local, desde las 12 hasta las 5, pone ocho agentes dedicados, únicamente, a recorrer estos 400 metros. Tenemos un servicio de limpieza impecable. Además, hemos iluminado la playa porque era un lugar de excesos. Todas estas medidas están consensuadas con los vecinos, hoteles y hosteleros. Es verdad que hay mucho exceso e intensidad, pero el Ayuntamiento está trabajando. Reconozco que hay molestias, pero existen desde hace treinta años, no es algo nuevo. Todo es matizable, pero el Ayuntamiento pone argumentos al respecto.

¿Cuál es la medida más importante que ha puesto el Ayuntamiento para acabar con el turismo de borrachera?

El pasado día 25 se puso en marcha la ordenanza de Pubcrawling.

¿Qué es el Pubcrawling?

Son una especie de excursiones etílicas que se ofrecen a los turistas en forma de un paquete de visitas a distintos locales de ocio donde van a poder beber a un buen precio. Se cobra a los turistas unos 70 u 80 euros y otra cantidad más alta al bar adonde se les desplaza. Además, estos grupos han pasado el día en una fiesta de la que ya salen en condiciones desastrosas.

¿En qué consiste la ordenanza que ha entrado en vigor?

Ahora, aquellas empresas que quieran realizar esta actividad tienen que estar dadas de alta en el Ayuntamiento. La actividad no se puede prohibir porque los servicios jurídicos estuvieron estudiándolo y no fue posible. Hemos optado por regularlo. Se va a obligar a estas empresas a que tengan un seguro de responsabilidad civil por si hay algún desperfecto público. Los grupos no van a poder tener más de cincuenta personas y van a tener que ir con chalecos que los identifiquen. Además, aquellos bares que acojan pubcrawling de forma ilegal incurrirán en una falta grave. Con estas medidas vamos a poder limitarlo. No es fácil porque este tipo de grupos genera mucho dinero y hay mucha picaresca.

Vayamos por partes. Este grupo de vecinos se ha quejado de unos barcos que llegan a la playa alojando a jóvenes absolutamente borrachos que, en el momento en el que pisan la arena, empiezan a cometer todo tipo de excesos. Además, hablan de «una música terrible».

Todo lo que ocurre más allá de la costa es competencia de la Demarcación de Costa y de la Capitanía de Puertos. Es algo que depende del Estado y no de nosotros. Hemos elevado la queja al Gobierno balear y a la Delegación del Gobierno. En este sentido estamos muy mancos porque no podemos intervenir.

Pero, ¿hasta qué punto es alarmante esta situación?

Personalmente creo que se está llevando al extremo. Puede ocurrir de forma puntual. Por ejemplo, si se está cuatro horas en la playa pueden pasar dos de estos barcos. No voy a negar la existencia de estas situaciones, pero no se puede decir que esto sea frecuente y absolutamente insoportable.

Los vecinos se quejan de que hay mucha droga en los bares y discotecas de Magaluf.

La competencia de la persecución de droga es de la Guardia Civil. Cuando la Policía Local lo detecta se tiene que poner en contacto con la Guardia Civil. Esto es una responsabilidad suya y de la Delegación del Gobierno. La Policía Municipal está para otra cosas como el desorden, el tráfico y el ruido, pero no para la persecución de las drogas. Todos los sanbenitos nos caen encima, pero hay cosas a las que no llegamos.

¿Piensa que hay mucha droga en Magaluf?

El algo difícil de valorar. Cuando me desplazo por otros núcleos veo que el olor a marihuana está a la orden del día. También existen otros estupefacientes, es cierto. Pero yo no lo he detectado porque no me muevo por esos sitios. Es un tema de investigación y de la Guardia Civil. Es un problema generalizado de la sociedad, pero que está en todas las discotecas que acogen a mucha gente, no solo aquí.

Según cuentan los vecinos, existe una ordenanza que dice que no se puede vender alcohol a aquellas personas que vayan demasiado ebrias. Aseguran que se incumple.

Es cierto que existe esta normativa. Pero claro, con las aglomeraciones tan grandes que se dan es difícil detectar si una persona va ebria o no. ¿Cuál es la gradación que determina que estás ebrio? Claro, si un tipo está por los suelos, se ve fácil, pero si se ha tomado tres copas, ¿es tan fácil de detectar?

Los vecinos insisten en que se vende alcohol a turistas que van «claramente» ebrios.

Si la Policía detecta esta situación, se levanta acta inmediatamente. Pero, la Policía no está permanentemente en el interior de los locales salvo que haya habido una denuncia. No puede haber un agente en cada local durante las 24 horas. No niego que se den estos casos, pero es más difícil controlarlos de lo que parece.

Por último, este grupo de firmantes se queja de los turistas británicos. ¿Ha habido conversaciones con el consulado de este país?

Ha habido un feedback permanente entre las instituciones británicas y las españolas. La prensa de este país ha vivido de todo esto. La noticia les ha funcionado bien y han seguido con ello. No he estado personalmente en estas reuniones, pero ellos asumen parte de la culpa. Espero que hagan algún tipo de campaña para minimizar este tipo de cosas.

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