Fernández reconoce el uso de pelotas de goma en el agua, pero sin alcanzar a inmigrantes

En una comparecencia a petición propia en el Congreso, el ministro ha dado cuenta de un «informe exhaustivo» sobre el incidente elaborado por la Benemérita, en el que se admite que se disparó material antidisturbios al agua para «fijar» a los inmigrantes que se acercaban a la orilla de Ceuta «la traza fronteriza en el mar», de modo que se les hizo visible «una barrera disuasoria», «sin que ninguno de ellos fuera alcanzado». En este sentido, Fernández ha subrayado que «no hay relación causa-efecto» entre aquella práctica y las muertes que, ha insistido, se produjeron en todos los casos en el lado marroquí.

«Las acciones de contención y rechazo llevadas a cabo por la Guardia Civil lo fueron por el empleo racional de medios antidisturbios reglamentarios, siempre en aguas nacionales, por personal instruido y siguiendo los criterios de oportunidad, congruencia y proporcionalidad, por lo que quedan enmarcados en el uso legítimo de la fuerza», ha señalado.

El titular de Interior también ha dedicado parte de su intervención a acreditar que no se produjo ninguna «devolución en caliente», esto es, entrega de inmigrantes que hubieran logrado entrar en territorio nacional, porque tal supuesto no se produjo. Fernández ha sido firme a la hora de sostener que, como está protocolizado desde 2005, eso sólo sucede si los extranjeros logran superar el control de vigilancia de la Guardia Civil desplegado en la orilla, cosa que no ocurrió. Por tanto, no cabía aplicar el régimen general de extranjería, por lo quelos agentes devolvieron a las fuerzas marroquíes a los extranjeros, que no habían entrado en los límites de España.