Zapatero: «Sí, volvería a ser presidente del Gobierno»

Zapatero ha admitido que durante su mandato pasó por «momentos difíciles» al ver que mucha gente empezaba a sufrir en España a consecuencia de la crisis económica y su capacidad para evitarlo «era limitada a pesar de los muchos esfuerzos que hice».

«Un país con la renta per cápita de España debería tener un sistema algo más organizado para que estas situaciones de grave riesgo y exclusión fueran atendidas por las administraciones públicas», ha destacado el exjefe del Ejecutivo.

Zapatero que en estos días presenta su libro «El dilema» en el que «intenta argumentar con razonamientos y explicar los hechos», ha insistido en que no fue una maniobra electoral evitar la palabra crisis en los prolegómenos de la campaña de 2008 porque ésta tuvo lugar en febrero y 2007 se había cerrado «creciendo al 4% prácticamente, creando 400.000 empleos con superavit en las cuentas públicas... Teníamos la economía muy bien».

«Nadie había previsto» la caída de Lehman Brothers que provocaría una crisis financiera sin precedentes, ha continuado. «Que la economía estaba peor en 2008, sí pero que íbamos a tener una crisis que se iba a llevar por delante el sistema financiero, no», ha subrayado antes de admitir que fue un error no pronunciar la palabra crisis hasta julio de 2008.

«Sorprendido» por Solbes

El expresidente del Gobierno no ha querido polemizar con su exministro de Economía Pedro Solbes, quien asegura que le advirtió de la crisis , aunque sí ha dicho que le ha «sorprendido esta aparición que ha hecho».

«Teníamos superavit en las cuentas públicas, tenía margen de maniobra» cuando aprobó los 400 euros en 2008 para ayudar a las familias a través del IRPF, ha subrayado Zapatero, que ha defendido el cheque bebé de 2.500 euros como ayuda a la natalidad para todos porque «la universalidad de las ayudas y servicios públicos es una garantía para aquellos que más lo necesitan».

Sin llegar a afirmar con rotundidad su apoyo a la decisión del presidente del Gobierno Mariano Rajoy de no acudir al rescate, Zapatero ha destacado que durante las dos reuniones que mantuvieron en el traspaso de poderes, «el 80% del tiempo lo dedicamos al no rescate». Él había evitado esta opción , según revela en su libro, y Rajoy la veía como «un malísimo trago para España», según ha señalado.