El exdirigente de Segi en Navarra Luis Goñi ha anunciado, a través de un vídeo colgado en «Gara», su intención de entregarse el próximo domingo, al parecer, harto de dos meses de clandestinidad, después de que se ocultara el pasado mes de julio para ... no cumplir una condena de seis años de cárcel que le impuso el Tribunal Supremo.
Otro compañero suyo, Xabier Sagardoy , condenado en la misma causa, tuvo menos aguante y se entregó a la Guardia Civil el pasado 29 de setiembre. Para camuflar su entrega, Goñi asegura en el vídeo que da por cumplidos los objetivos que le llevaron a esconderse, que no eran otros que «mostrar la situación de los procesados y crear condiciones para poder responder a estas injusticias como pueblo». Añade que el próximo domingo se dejará ver por las calles de Pamplona.
Sin embargo, para ese domingo un colectivo de la «izquierda abertzale» ha convocado en la capital navarra lo que denominan «muro popular» con la pretensión de proteger al activista de Segi en un intento de obstaculizar su detención y seguir de esta manera instrumentalizándolo. Una estrategia que los proetarras ya han puesto en funcionamiento meses atrás en San Sebastián y Ondárroa , ambos feudos de Bildu, donde la Ertzaintza, que tardó varios días en intervenir, tuvo que emplearse después a fondo para arrestar a otros dos miembros de las juventudes batasunas.
Un prófugo de Segi anuncia su entrega, harto de dos meses en la clandestinidad
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