«En España hay un pequeño número de fundamentalistas islámicos que justifican el terrorismo»

En declaraciones a Servimedia, Reinares catalogó el asesinato del militar como un «acto terrorista» por cuanto que utilizó la violencia «con el propósito de difundir miedo y plantear demandas que tienen que ver con la acción de los gobiernos , el desarrollo de las instituciones representativas o el parecer de los ciudadanos».

«La voluntad del terrorismo es la de la provocación», certificó, pero precisando que es difícil que logre su objetivo de enfrentar a las comunidades étnicas en países occidentales como el Reino Unido o, en su caso, España, cosa que sí han conseguido en Irak o Pakistán, sin Estado de Derecho ni sociedad civil fuerte.

Reinares desautorizó como un «argumento falso» que los yihadistas apelen a los muertos musulmanes como justificación de su venganza en Occidente, por cuanto que al menos desde 2002 «la inmensa mayoría de las víctimas que producen los terroristas yihadistas son musulmanes».

Segmentos de población vulnerables

Según apuntó, los asesinatos y atentados islamistas son «mucho más una expresión violenta de conflicto entre musulmanes que la manifestación de un antagonismo entre musulmanes y el resto de la humanidad».

Este analista reconoció que « no es posible una prevención absoluta ante los atentados terroristas »; ahora bien, añadió que «es razonable plantearse si, en estos momentos y en sociedades como las de nuestro entorno, los medios de prevención del terrorismo yihadista están adecuados a los fines previstos o se encuentran en estos momentos por debajo del óptimo deseable».

En su opinión, los gobiernos occidentales deberían «ante todo, identificar y localizar los segmentos de población vulnerables a la propaganda yihadista e impedir que los propagadores de esta ideología puedan difundirla, bien a través de los púlpitos o bien a través de internet».

Además, opinó que habría que «mantener, dentro de la ley, un adecuado seguimiento de sospechosos, para evitar que puedan desarrollar actividades relacionadas con la movilización terrorista». Y, finalmente, «instar a que los musulmanes que se sientan demócratas hagan oír con firmeza sus voces frente a los yihadistas y los salafistas que los toleran».