Sánchez-Camacho afirma que el PP debe «dar explicaciones a los españoles» por el caso Bárcenas

El máximo órgano del partido entre congresos del partido no se reunía desde hace nueve meses y se celebra en un momento político convulso marcado por el «caso Bárcenas» y la crisis económica. La reunión se produce además dos meses después de la última vez que Rajoy habló a los suyos, en un Comité Ejecutivo Nacional en el que ya había estallado el caso Bárcenas y donde el presidente aseguró no haber cobrado nunca dinero negro y prometió la máxima transparencia de su partido en este asunto.

A la puerta de la sede del PP se agolpan decenas de periodistas que esperan la llegada de los dirigentes de la formación, aunque la mayoría de ellos no se ha dejado ver y ha preferido entrar en el edificio por el garaje.

Sí ha hablado ante los informadores la presidenta del PP en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, que ha afirmado que aunque el extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas, les haya «robado», el partido «tiene que dar explicaciones a todos los españoles».

El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo ha asegurado que «lo que ese ha estropeado en ocho años (de Gobierno socialista) no se puede arreglar en uno». Ha reconocido que «no es agradable» ver a la multitud de ciudadanos protestando contra las medidas del Gobierno. «Sabemos que la situación es difícil -aseguró-, nos han votado para buscar soluciones y es lo que estamos intentando».

El portavoz del PP en el Senado y vicepresidente de los populares gallegos, José Manuel Barreiro, por su parte, se ha mostrado convencido de que la reunión servirá para que el PP discuta sobre los problemas que de verdad preocupan a los ciudadanos porque, ha asegurado, «eso es lo importante».

Junto al PP también se manifiestan una decena de afectados por las participaciones preferentes de Bankia que alzan sus gritos cada vez que acude a la sede popular un dirigente del partido. «¿Dónde está nuestro dinero? En el sobre del pepero», son algunas de las consignas de los manifestantes.

La masiva afluencia de periodistas y la falta de espacio también ha provocado un pequeño incidente entre un cámara de televisión y un miembro de la Policía Nacional, que ha acabado con la identificación del informador gráfico.