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Comprueba cómo de decisivo fue tu voto para el resultado final de las elecciones generales 2016

El 26-J dejó una distancia muy estrecha entre el número de votos del último diputado y el de la candidatura más próxima

Luis Cano

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Todos los votos cuentan, aunque, en los resultados de las elecciones del 26-J, unos fueron más decisivos que otros. En algunas provincias, la diferencia es muy estrecha entre el número de votos que obtuvo el último diputado electo de la circunscripción y la cifra conseguida por la candidatura que se quedó más cerca de las puertas del Congreso. Un puñado de papeletas que decantaron el reparto final de escaños.

[Pincha en cada provincia en el mapa para conocer más datos sobre cada circunscripción.]

A Ciudadanos cada escaño le costó 97.618 votos, más que a ningún partido. Tuvo que pagar un precio todavía mayor que en 2015, cuando desembolsó 87.511 papeletas por cada asiento por la aplicación de la ley D’Hondt con circunscripción provincial, la regla que rige el sistema electoral español.

Ciudadanos perdió el 26-J ocho escaños tras dejarse 390.759 votos respecto a diciembre. Su problema estuvo en el baile del último escaño. Se quedó a las puertas de conseguir asiento en diez circunscripciones, en siete de las cuales sí lo obtuvo el 20-D.

En Salamanca , por ejemplo, si hubiera obtenido 677 votos más, contaría con el diputado que finalmente le arrebató el PP. En la provincia de Madrid solo habría necesitado 3.671 votos más para haber retenido a su séptimo diputado. Supone tan solo un 0,08% del censo electoral, la distancia más corta en porcentaje entre el último escaño repartido en una circunscripción y el aspirante más próximo. La oportunidad perdida más agónica de todos los partidos.

La siguiente tabla muestra el partido que tiene el último escaño repartido en cada circunscripción; el partido que está más cerca de arrebatar ese último escaño; los votos necesarios para conseguirlo, siguiendo la ley D’Hondt; y el porcentaje que esos votos necesarios suponen respecto del censo electoral de esa provincia. Puedes ordenar los resultados de mayor a menor pinchando sobre los encabezados:

Hay 11 casos con una diferencia menor del 0,5% del censo electoral entre el último diputado electo y la candidatura más próxima. Es decir, once escaños cuyo resultado se decantó por muy pocos votos. En seis de ellos, Ciudadanos ha sido el partido derrotado (Madrid, Toledo, Salamanca, Sevilla, La Coruña, Albacete). El 20-D sí los consiguió, pero ahora se han quedado tres el PP, dos el PSOE y uno Unidos Podemos.

La historia, sin embargo, pudo fácilmente ser todavía peor para Ciudadanos. Diez de sus diputados son los últimos electos por sus respectivas circunscripciones. Son menos que PP (15) y UP (14), pero son más proporcionalmente y, sobre todo, más vulnerables puesto que cinco de ellos están sostenidos por debajo del 0,52% del censo. El PP, en esa situación, solo tiene 3 diputados, mientras que PSOE y Unidos Podemos a dos cada uno.

Uno y uno no suman dos en política

El pragmatismo llevó a IU a unir fuerzas con Podemos, con un resultado lejos de lo esperado. En política, uno más uno no suman dos. El líder de Ciudadanos, Albert Rivera , en su queja contra la penalización que supone la ley D’Hondt para su formación, lamentó el desigual castigo respecto a Unidos Podemos puesto que la pérdida de 1.089.760 votos de la alianza respecto al 20-D se tradujo en el mismo número de escaños, 71, de la suma Podemos (69) e IU (2). No obstante, con los votos del 20-D, una hipotética alianza Unidos Podemos en aquella ocasión habrían supuesto 85 escaños . La caída, por tanto, es significativa también en la formación morada.

En cinco provincias, Unidos Podemos ha sido la formación más próxima al último escaño con un diferencia menor al 1% del censo electoral, es decir, muy cerca de haberlo logrado. En dos de esas circunscripciones, Almería y Orense, sí lo obtuvo el 20-D. Los votos del partido animalista PACMA no habrían sido suficientes a Unidos Podemos en ninguna provincia para lograr ninguno de esos escaños en caso de que hubiera formado parte de la alianza de izquierdas.

Un puñado de papeletas

Tres de los escaños que perdió el PSOE estuvo a punto de retenerlos por unos cuantos votos, menos del 1% del censo. Entre ellos el de Lérida que se quedó el PP: 1.940 papeletas, el 0,65% del censo, habrían sido suficientes. Aunque donde más cerca estuvieron fue en la provincia de Barcelona, a apenas 11.704 votos, el 0,29% del censo de arrebatarlo a Ciudadanos, que lo consiguió aguantar a pesar de haber perdido más de 82.728 votos.

El PP, vencedor de las elecciones, rentabilizó los 669.220 votos más logrados respecto el 20-D consiguiendo 14 escaños adicionales. El PP consigue un diputado por cada 57.709 votos, un ratio solo mejorado por PNV, con 57.243 votos por asiento. Y todavía pudo ser un poco mejor. En Murcia, con poco más de 2.000 votos habría arrebatado otro asiento a Ciudadanos; y en Gerona fueron menos de 5.000 votos los que le impidieron ganar uno a CDC.

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