SEAT acelera y se confirma como la mayor empresa exportadora de la industria española

Lo mismo ocurre con la planta de Martorell, que se ha consolidado como la fábrica que produce más automóviles de las diecisiete del sector que hay instaladas en nuestro país. El año pasado fabricó 449.063 vehículos. Un liderato que también se produce en innovación, al ser SEAT el principal inversor industrial en investigación y desarrollo (I+D) de nuestro país: desde 2012 ha invertido 3.000 millones de euros tanto en investigación y desarrollo de ingeniería aplicada al automóvil en su Centro Técnico, como en equipamientos e instalaciones productivas.

SEAT esta inmersa en la mayor ofensiva de producto de su historia, con cuatro nuevos modelos en 2016-2017, lo que se ha traducido en una cifra récord de I+D, al destinar un 47% más al conjunto de este capítulo en 2016 hasta alcanzar una cifra de 862 millones de euros, 276 millones más que en 2015. La compañía invirtió en 2016 en I+D un 10% de sus ingresos, lo que supone casi el 3% de la inversión total que se hace en España por ese concepto, hasta el punto de ser el mayor inversor industrial del país y la cuarta empresa española que destina más recursos a la innovación. De hecho, el centro de investigación y desarrollo de SEAT es el único completo que existe en el sector del automóvil, no solo de nuestro país, sino de todo el sur de Europa.

En la «pole»

Las inversiones en I+D buscan colocar a SEAT en la "pole position" para liderar también la revolución del vehículo conectado y de la "smart mobility". Sobre todo después de haber puesto en marcha el SEAT Metropolis:Lab Barcelona, un centro integrado en la red mundial de laboratorios digitales del Grupo Volkswagen. La compañía pretende tener un papel pionero y ser una referencia del coche conectado, ya que las tendencias indican que la conectividad se convertirá en una de las cuatro claves que determinarán la compra del vehículo, en un mundo en el que el cliente no será el punto final de la cadena, sino el centro de la red.

Liderato en la industria 4.0

El sector del automóvil como tal arrancó en España en la década de los 50 con el SEAT 600. Precisamente, este año se cumple el 60 aniversario de la producción del primer vehículo de ese modelo. Mucho se ha avanzado desde entonces y, a día de hoy, nadie discute que la industria del automóvil es uno de los pilares del desarrollo económico de nuestro país, que es el segundo fabricante europeo y el octavo mundial, hasta el punto de que la automoción en España es el tercer sector con más impacto en el PIB. Sesenta años después del primer 600, en SEAT están instalados alrededor del 10% de todos los robots que hay en España, además de haber incorporado ya en su producción elementos de la industria 4.0 con el objetivo de ser la mejor smart factory española. Por ejemplo, en la factoría de Martorell circulan coches autónomos que transportan piezas; los empleados utilizan gafas de realidad virtual y en las cargas más pesadas, los trabajadores usan exoesqueletos para facilitar sus tareas como si llevaran incorporadas unas piernas de Robocop.

Escuela de aprendices

La formación es otro de los puntales de SEAT desde que hace 60 años creó su Escuela de Aprendices. En 2012 implementó un programa de formación dual, basado en el modelo alemán, que permite poner en práctica en los talleres la teoría aprendida en las aulas, mientras el alumno recibe un salario por su colaboración en la producción. Además, la compañía imparte cursos a sus empleados para explicarles qué es y en qué consiste la Industria 4.0, acompañándoles en su "reinvención" en tanto no llegan títulos oficiales de formación profesional en impresión 3D, conectividad, uso de tecnologías como realidad virtual y aumentada y fusión entre mecatrónica e informática, entre otros.

Gracias a estas iniciativas, la compañía ha mejorado sus niveles de productividad, lo que se ha traducido en una reducción del coste de fabricación por unidad en un 10,6% con respecto a hace cuatro años. De esta forma, la marca española del Grupo Volkswagen ha posicionado sus vehículos en los primeros puestos de los rankings de productividad, además de recibir premios internacionales, como el Lean Award y el Lean & Green Management, que certifican la planta de Martorell como la más eficiente del sector en Europa.

Una eficiencia que se extiende al campo de la sostenibilidad. La inversión destinada a reducir el impacto medioambiental superó el año pasado los 17 millones de euros, lo que supone una media de más de 1.200 euros por empleado, cuando la media del sector de la automoción en España es de 400 euros. Las iniciativas llevadas a cabo en eficiencia energética desde 2011 han permitido a SEAT evitar el consumo de más de 100.000 megavatios a la hora, lo que equivale al consumo anual de más de 10.200 hogares españoles.

La marca ha impulsado un clúster de investigación con la Universidad Politécnica de Cataluña y un laboratorio para ayudar a facilitar la movilidad en las ciudades con, por ejemplo, una buena gestión del aparcamiento, actividad en la que se suele invertir un 25% del tiempo en las urbes. Para el presidente de la compañía, Luca de Meo, "no sólo se trata de fabricar y vender, también se trata de ofrecer nuevas soluciones para mejorar la movilidad".