La Agencia Tributaria registra dos sedes de Google en Madrid por presunto fraude y evasión fiscal

El registro se produjo después de que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 29 de Madrid autorizara a la Agencia Tributaria la entrada en las oficinas de la multinacional. El Fisco pidió el permiso el pasado lunes para continuar con la investigación abierta sobre la empresa. Un portavoz de Google ha asegurado que cumplen «con la legislación fiscal en España» al igual que en todos los países en los que operan.

«Estamos cooperando con las autoridades en España para responder a todas sus preguntas, como siempre», ha añadido el portavoz de la compañía.

Los encontronazos de Hacienda con la tecnológica han sido frecuentes en estos años. El Fisco sospecha que la filial española de la tecnológica desvía su facturación a su matriz europea en Irlanda para así aligerar su factura tributaria. Al repasar las cuentas de Google España de los últimos ejercicios llama la atención que la filial facturó apenas 38,3 millones en 2011 . Una cifra reducida si se considera la cuota de mercado que el motor de búsqueda tiene en España: del 95%.

Lo más sorprendente, sin embargo, es que la empresa de Silicon Valley no pagó Impuestos de Sociedades en 2011: su declaración le salió a devolver. En las cuentas de Google Spain se declararon pérdidas entonces de 107.987 euros. Por ello, Hacienda le adeudó a la compañía un total de 33.304 euros para compensar bases imponibles negativas en los siguientes ejercicios. ¿Cómo sucedió esto? La propia Google lo recoge: desvió casi la totalidad de la facturación (38,3 millones) a su sucursal en Irlanda: 36,9 millones.

Ante estas prácticas, H acienda abrió en 2014 inspecciones a Google sobre el pago de impuestos de cuatro ejercicios, los que van de 2011 a 2014, para investigar el pago de IVA, Seguridad Social, IRPF, Aduanas e Impuesto sobre Sociedades. «L a Sociedad tiene abiertos a inspección los ejercicios que se mencionan a continuación », detallan las cuentas de Google España depositadas en el Registro Mercantil en 2014, en referencia al periodo 2011-2014. Fuentes de la compañía señalaron que los registros de hoy no han sido por estas razones, ya que estas inspecciones se archivaron finalmente.

El plan de control tributario, aprobado el pasado febrero, incluye un aumento del control a las multinacionales y al comercio electrónico. En esta línea, el Ministerio de Hacienda creó la Oficina Nacional de Fraude internacional (Onfi) en 2013, organismo que el año pasado destapó casi 2.600 millones de grandes empresas tras un total de 119 inspecciones

La multinacional norteamericana ha cosechado varias investigaciones por sus prácticas fiscales en todo el continente. Francia ya registró el pasado mes de mayo las oficinas de Google en París por evasión fiscal, al reclamarle 1.600 millones de euros. Reino Unido llegó a anunciar la llamada «Google tax» para asegurar que las grandes empresas no desvíen sus beneficios procedentes de su actividad en el país a otros estados con una fiscalidad más amable, con un 25% de tributación.

La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) diseñó un plan de lucha contra la ingeniería fiscal perfectamente legal que diseñan las multinacionales (el llamado plan BEPS) con medidas como la obligación de que las grandes empresas detallen los impuestos que pagan en cada país, así como su actividad. Este plan incluye un punto dedicado exclusivamente a la elusión fiscal de los gigantes tencológicos, en referencia a las prácticas de Apple, Amazon, Facebook o la propia Google.

España tramitó este plan en la reforma fiscal para «desnudar» fiscalmente a las multinacionales, por lo que las compañías que facturen más de 750 millones en nuestro país deberán informar a Hacienda de su actividad e impuestos en los estados en los que operan desde el año que viene.