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chema gonzález - Alterkeys

«La economía colaborativa ha llegado para quedarse»

El CEO de Alterkeys demanda una regulación para los nuevos modelos, pero con reglas claras y evitando la disparidad autonómica

«La economía colaborativa ha llegado para quedarse» abc

víctor ruiz de almirón

Desde la generalización de internet, y a medida que los dispositivos tecnológicos han ido avanzando, se libra una «guerra» entre los sectores tradicionales y los modelos incipientes. La batalla es económica y no hay sector que no sea vea afectado . En los últimos meses se ha generalizado el debate sobre cómo estos nuevos sistemas pueden llegar a dañar, hasta el punto de eliminarlos, a los modelos tradicionales.

La economía colaborativa es probablemente el ejemplo más radical. Pequeñas plataformas que sirven de intermediarios entre particulares para que éstos compartan un servicio. El sector del transporte y el alojamiento ha sido el primer afectado. « Podrán ganar una batalla legal puntual, pero no la guerra . La economía colaborativa ha llegado para quedarse porque tiene sentido económico y social». Quien se muestra tan contundente es Chema González, creador del Alterkeys, plataforma que gestiona alojamientos vacacionales entre particulares.

Su postura es no obstante bien moderada. Reconoce que «necesitan» una regulación, y dice entender perfectamente al sector hotelero. Incluso no duda en ponerse de su parte para reivindicar que a los hoteles se les debe reducir también la carga burocrática. «Nuestra regulación no debe ser igual que la suya, pero desde luego ellos necesitan reducir sus cargas, pero es absurdo poner las mismas leyes para un propietario que ofrece su casa que a un hotel que dispone de 500 camas».

Sin embargo, desde Alterkeys apuntan que el camino que España ha emprendido para regular el sector está lleno de contraindicaciones. «Se ha optado por regular a través de la Ley de Arrendameintos Urbanos, y por dicha reforma ahora depende de cada Comunidad. Así que tenemos 17 potenciales regulaciones. Queremos regulación, pero que sea asequible y sencilla de cumplir».

A su juicio, el mejor ejemplo de que son partidarios de un negocio con normas es su decisión de eliminar de su portal 2.731 viviendas que no cumplían los requisitos establecidos por la Generalitat de Cataluña en materia de alojamiento turístico, como es tener una licencia para poder ofertar la vivienda en el mercado o contar con un número de registro.

Origen y futuro global

Alterkeys cuenta ya con más de 100.000 casas en 5.200 ciudades en Europa. «En España estamos en casi cualquier ciudad de relativa importancia turística». Esta compañía nació cuando a Chema y a un amigo se les ocurrió alquilar su piso en Londres, donde trabajaba en el sector financiero, cuando no estuvieran en la ciudad.

Era mediados de 2011 y la capital británica iba a celebrar en unos meses los Juegos Olímpicos. Parecía un buen negocio, «pero no encontramos soluciones en internet que les dieran confianza». A partir de entonces comenzaron a pensar en que podían cubrir ese hueco. Esa es la semilla de una compañía que hoy se ha profesionalizado. Los viajeros no pagan nada y el dueño de la casa, cubierto con un seguro ante incidencias, paga entre un 10 y un 15% solo cuando se produce una reserva. Al dueño solo se le entrega el dinero cuando el viajero certifica que no hay ningún problema.

Una nueva forma de viajar para una nueva economía. «Aquí se ha abierto una caja de pandora y no se va a poder cerrar. Los sector tradicionales deben adaptarse, porque esto ya se está metiendo en nuestro ADN. Ha llegado al transporte , ha llegado al alojamiento y va a llegar a otros sitios que todavía no nos imaginamos».

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