La puja de Vodafone por Ono augura un nuevo reparto del mercado de ADSL y fibra

El grupo británico se convertiría en el segundo operador del país en el segmento de banda ancha fija, obligando a Orange a mover ficha para no ceder terreno y elevando el apetito por Euskaltel y R

La puja de Vodafone por Ono augura un nuevo reparto del mercado de ADSL y fibra abc

M. V.

11/02/2014
Actualizado a las 10:18h.

Jazztel marcó en 2010 un hito en el mercado español de las telecomunicaciones al ganar más clientes de banda ancha fija que Telefónica, algo que hasta entonces ningún operador había conseguido. El antiguo monopolio sumó durante ese ejercicio 237.326 líneas netas, hasta los 5, ... 61 millones de hogares. Por su parte, la compañía presidida por Leopoldo Fernández captó 263.114 nuevas líneas, hasta las 855.109, según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Hoy sigue siendo una de las compañías que a más ritmo capta usuarios de ADSL y fibra óptica, un mercado que continúa dominado claramente por Telefónica pero cuyo reparto podría cambiar con el proceso de concentración del sector que se avecina.

La multinacional española atesora un cuota de mercado en este segmento del 48,07%, según los últimos datos disponibles, correspondientes a septiembre de 2013. Telefónica acumula 5.679.515 líneas de banda ancha fija, del total de 11,8 millones que hay en el país. Aunque la competencia de otros operadores es cada vez más fuerte, su plan de despliegue de fibra óptica empieza a darle resultados: de las más de 96.000 nuevas líneas de banda ancha fija contratadas durante el tercer trimestre del año pasado, el 25% corresponden a accesos de fibra óptica, infraestructura que lidera la compañía presidida por César Alierta.

Telefónica cerró 2013 con unos 594.000 usuarios de fibra, un 90% más que un año antes. Sus planes pasan por llegar a siete millones de hogares pasados con fibra a finales de este año, ritmo que incluso podría incrementarse. En 2012 firmó un acuerdo con Jazztel por el cual compartirán los conductos verticales de tres millones de hogares , de los que cada operador debe desplegar 1,5 millones. Ese pacto podría incluso ampliarse para, entre ambas, llevar la fibra a 4,5 millones de viviendas.

La convergencia de productos, clave

Esos datos hacen pensar que Telefónica se mantendrá como líder del negocio y han convertido a Jazztel en una de las «telecos» de referencia en el segmento de la banda ancha fija de alta velocidad. Con 1.388.983 líneas contratadas y una cuota de mercado de 11,75% es ya el cuarto operador en este negocio, por detrás de Telefónica, Orange (13,50%) y Ono (12,93%). En 2012 volvió a ser el que mayor ganancia neta de líneas tuvo, con 216.130 usarios, 85.000 más que el segundo operador con mejores datos ese año, Orange.

Esa red de fibra óptica más su cuota han convertido al grupo en uno de los objetivos de los operadores débiles en este servicio y que deben completar su oferta para poder sobrevivir a un proceso de consolidación del que saldrán vencedoras aquellas compañías capaces de ofrecer todos los servicios —móvil, fijo, banda ancha y hasta televisión— en un solo paquete.

Ese es el motivo por el que Vodafone se ha lanzado a por Ono . El grupo británico, con solo un 7,60% del mercado de ADSL, ve en el operador de cable una oportunidad para entrar con fuerza en el segmento, pues Ono (12,93%) tiene pasados siete millones de hogares con su red fija ultrarrápida. Con ello, alcanzaría una cuota del 20,5%, situándose en el segundo lugar del mercado. Eso obligaría a Orange a mover ficha y pujar por Jazztel para no perder el tren de la fibra y no ceder terreno ante Vodafone.

Las porciones más pequeñas de la tarta del negocio de ADSL y fibra óptica son para los operadores de cable regionales: Euskaltel (2,18%), R (1,78%) y Telecable (1,02%). Ahora bien, las compañías vasca y gallega tienen en sus respectivas comunidades una cuota de más del 50% y los fondos de inversión que controlan sus accionariados, con el fin de rentabilizar sus inversiones iniciales, les han puesto el cartel de se vende. Eso hace que después de las previsibles operaciones en torno a Ono y Jazztel, sean las siguientes piezas a batir.