El día que Solbes recuperó la memoria
El ex vicepresidente económico de la era de Zapatero reconoce ahora que negí la gravedad de la crisis
María jesús pérez
«Cualquier tiempo pasado fue mejor, dice una expresión proverbial española con la que se da a entender que el recuerdo del tiempo pasado, por malo que haya sido, siempre nos ofrece una idea de felicidad, en ocasiones falsa e ilusoria. Y ahí está la ... clave, en que quizás, esa idea de felicidad pasada, no siempre es real. Incluso pudiera ser una mentira». Así, podría haber arrancado el recientemente publicado libro de Pedro Solbes , en un acto de contrición del político socialista ante los ciudadanos españoles. Un «mea culpa» que hoy, quizás, ya da igual. Porque la situación político-económica y social por la que pasa España es la que es, y arrepentirse de lo que fue y explicar lo que pudo ser no nos va a hacer felices hoy ni mucho menos «sacarnos de pobres».
Y es que la gran mentira que vivió Solbes en su época ministrable con José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno (fue su vicepresidente económico entre 2004 y 2009, año en el que dimitió) es la gran mentira de lo que había detrás del telón de una representación protagonizada principalmente por ambos políticos.
Una mentira que incluso se escenificó en vivo y en directo a través de la televisión, en un debate que enfrentó al entonces aún vicepresidente económico con el que podría haber sido su sucesor, Manuel Pizarro , a pocos días de unas elecciones generales que volverían a ganar los socialistas. Si en aquel preciso momento Solbes hubiera defendido en público lo que ahora dice que defendió en privado ante el presidente Zapatero, quizás los renglones de la historia no estarían tan dramáticamente torcidos como lo están ahora. La «herencia envenenada» de la que se queja el actual Gobierno de Rajoy hubiera sido otra. O no.
Ahora bien, la historia verdadera, la historia según Solbes, la que podría haber sido pero no fue, está en su libro. Y... ¿por qué ahora cinco años después Solbes cuenta su verdad?... o su mentira, dirán algunos, como podría ser el caso del propio expresidente Zapatero , a punto, por cierto, también de presentar el próximo 26 de noviembre «El dilema», un libro de memorias centrado en su última etapa al frente del Ejecutivo y en cómo vivió la crisis económica de esos años. Pero para conocer esta verdad, aún hay que esperar...
Un documento «fantasma»
Mientras, «Recuerdos. 40 años de servicio público», son las memorias de Pedro Solbes , que, según subraya el propio autor, no pretende ser ni un ajuste de cuentas, ni un libro sobre la figura de Zapatero , ni sobre la crisis, sólo pretende ser «una visión necesariamente parcial de lo que ocurrió en esos años». Entre sus «recuerdos» habla de un «documento». Explica que ese documento que entregó a Zapatero fue la causa de su salida del Gobierno . Pero, para su sorpresa (¿o no?) Zapatero no recuerda el documento. Y en los archivos de La Moncloa no aparece por ningún lado. Conclusión, una vez más, uno de los dos miente. Como cuando reafirmaban una y otra vez, desde el primero al último miembro del Gobierno Zapatero , que la economía iba bien, que había brotes verdes y que de crisis «nada de nada», sí «turbulencias económicas».
Dicen los que al parecer saben de la existencia del «documento fantasma» que Solbes criticaba con dureza la política económica del Gobierno de Zapatero, política que, paradójicamente, había puesto en práctica hasta ese momento él mismo. Cuentan que el documento era un ejemplo de autoflagelación, un «yo acuso» firmado por el acusado que deja en muy mal lugar a quien dice no saber de su existencia. Pero su realidad está ahí y él ha decidido contarla.
Y es que con la perspectiva del tiempo y las palabras escritas a la luz pública, la conclusión principal es que nadie ayudó tanto a Zapatero como él para mantener la gran mentira hasta 2008 . Y todo empezó, después de un periodo de amplia bonanza nada más llegar a La Moncloa en 2004, que acabó en el posterior gran «despilfarro» (el famoso cheque bebé, la deducción de los 400 euros en el IRPF...), y con la negación de la palabra maldita: «crisis». Una decisión esta última que el Gobierno de Zapatero toma en plena crisis económica y que el presidente y los ministros cumplieron a rajatabla. No era cuestión de arreglar la economía a través de la contención del gasto público, no. Ni de recortar el número de altos cargos y asesores para ahorrar. Se trataba de no pronunciar jamás la palabra «crisis». Si no se decía, es como si no existiera. Ni una sola vez, ni por descuido, ni por uno de sus famosos «lapsus», el jefe del Ejecutivo dijo la palabra maldita. Algo que cumplió igualmente a rajatabla Solbes. Pero las diferencias entre ellos eran latentes.
Solbes desgrana que entre las diferencias con su jefe estaba el hecho de que él personalmente no se mostraba proclive a aplicar restricciones en la política del gasto público, aunque Zapatero abogó por usar el margen presupuestario que aún existía para tratar de estimular la economía, algo que, con el paso de los años demostró que no resultó eficaz. Fue precisamente en este punto cuando Zapatero planteó el infructuoso «Plan E» de inversión pública a través de los ayuntamientos que «abrió todavía más la brecha» que les separaba. Sin embargo, echando mano del incómodo recurso de la videoteca, Solbes no parecía dispuesto a tener que encauzar ningún rumbo de la economía. De sus palabras recientes, clama al cielo una frase: «Durante el Gobierno de Zapatero se pudo hacer más» . Hoy, ya da igual.
El día que Solbes recuperó la memoria
Noticias relacionadas
- Pedro Solbes reconoce que hay «cosas buenas» en la reforma del sistema de pensiones
- Pedro Solbes: «La economía española ha tocado fondo y ahora vamos a ir para arriba»
- Las 50 veces que los socialistas negaron la crisis
- Éxitos (y fracasos) de los principales ministros de Economía de la democracia
- Solbes: «Me arrepiento de haberme presentado a las elecciones de 2008»
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete