Ricardo LEAL, FUNDADOR DE CRISTIAN LAY

De ayudante de joyería a estar al frente del mayor fabricante europeo de bisutería

Ricardo Leal explica a ABC su modelo de negocio que le ha llevado de crecer en un entorno humilde a presidir Cristian Lay, empresa con más de 1.200 empleados

De ayudante de joyería a estar al frente del mayor fabricante europeo de bisutería abc

f.j.c.

07/09/2013
Actualizado 10/09/2013 a las 12:06h.

«Cristian Lay es un negocio para emprendedores, cada quien es su propio emprendedor. Los distribuidores tienen todos los servicios, producto, diseño, precio, sólo debe generarse su propia red de ventas », de esta manera Ricardo Leal, fundador y actual presidente de la multinacional extremeña de joyería, resume el modelo de una de las pocas entidades que sí ha crecido con la crisis. De Cristian Lay destaca su particular sistema de negocio –basado en la venta por catálogo – pese a que España sea uno de los paises más complicados para este mercado, según reconoce Leal.

No obstante, Cristian Lay representa más del «35% de la bisutería que se exporta de España» y, además, según indica el Instituto de Comercio Exterior (ICEX), se encuentra consolidado como principal fabricante europeo en esta industria. Leal representa, por tanto, al perfecto «hombre hecho a sí mismo», sin formación universitaria, ha conseguido pasar de ayudante de joyería con apenas 14 años a presidir una empresa con más de 1.200 empleados.

El mérito, tal y como resalta el empresario, es aún mayor teniendo en cuenta que en 1981 y en en un pueblo alejado del tejido industrial de España como es Jerez de los Caballeros donde continua la sede central de la empresa y que en aquella década se limitaba, principalmente, al sector agrícola y ganadero.

¿Es imprescindible estudiar una carrera?

«Una carrera universitaria, claro está que es importante, sin embargo, hasta que no se empieza a ejercer el trabajo no experimentas lo que es un oficio; yo con 21 ya tenía a mis espaldas siete años en el oficio. Hasta ahora con la crisis, los jóvenes han estudiado para sacarse unas oposiciones y terminar siendo funcionarios. No todo el mundo puede estar de funcionario, hay que emprender, hay que desarrollarse, hay que crear» argumenta Leal ante una generación que se ha podido «acomodar» frente a los emprendedores de otro tiempo.

El estallido de la burbuja inmobiliaria ha significado para muchos el fin de la autopista al éxito en poco tiempo, el que es emprendedor hoy ya no tiene en mente hacerse rico al día siguiente, o al menos eso cree Leal: «Ser empresario no es estar mañana en la cúspide, es ir paso a paso, es aprendizaje. De igual manera, la construcción ha explotado y los que estaban ahí no eran precisamente empresarios sino que se basaban únicamente en el modelo del pelotazo». Ser empresario es, por tanto, algo bien diferente a lo que hemos sido testigos en los años de la burbuja, según considera el presidente de Cristian Lay.

«Tú no puedes cambiar el mundo»

«Yo parto de un conocimiento del negocio desde la base, en mi caso, lo conocí desde la raíz y creo que precisamente ha sido ésto mismo lo que me ha permitido crear mi empresa con éxito, ya que comenzar un proyecto así desde la cabeza es imposible. Tú no puedes cambiar el mundo, debes adaptarte a él, la vida es hacerte a lo que hay y a partir de ahí crecer», asegura Leal.

Adaptarse a los nuevos tiempos es, por tanto, la clave de su éxito. Por ello, según afirma el presidente de Cristian Lay, se han reciclado con el tiempo, abandonando progresivamente la sección de moda por el declive del consumo, y apostar de lleno por sus puntos fuertes, la bisutería y la cosmética . «La clave ha sido iniciar la apertura de ventas fuera, empezamos en el año 88 con Portugal, y ahora, cerca del 60% de nuestras ventas está fuera de España, en más de 17 países».

«Para mí, el secreto es la constancia y el trabajo diario, tienes que disfrutar con él, te lo tienes que pasar bien y si no que cambie de trabajo, yo soy feliz con lo que hago».